Hatem Ben Arfa está sin equipo al haber acabado su contrato con el PSG el pasado sábado, después de no haber disputado la temporada pasada ni un solo encuentro. Se estuvo entrenando todo el curso con el cuadro francés, pero lleva más de un año sin un partido de alta competición.
A sus 31 años, el francés se ha convertido en una cotizada pieza entre los agentes libres, un jugador con mucha calidad que valora en estos momentos diferentes ofertas. Una de ellas es la del Sevilla, escuadra que lo ha seguido en varias ocasiones y que ya estuvo cerca de ficharlo en 2016 cuando se adelantaron desde el Parque de los Príncipes.
Mundo Deportivo afirma que el futbolista le gusta mucho a Joaquín Caparrós, director de fútbol sevillista. Pero no al entrenador, Pablo Machín, a quien no le convence nada este jugador, pese a que acepte rebajar su ficha y esté dispuesto a formar parte de su plantilla, y no duda de su calidad.
Su carácter díscolo y su larga inactividad son motivos para sospechar para el nuevo entrenador hispalense, de acuerdo con el citado medio. Habrá que ver qué criterio se acaba imponiendo finalmente.