El presidente del Olympiacos Evangelos Marinakis sancionó a sus jugadores con 400 mil euros de multa y les mandó "de vacaciones" hasta el final de temporada tras pobre desempeño en el campeonato griego.
Marinakis, que también es propietario del Nottingham Forest (equipo de la segunda división inglesa), se enojó tras el empate 1-1 contra el Levadiakos del pasado domingo, que deja al aún campeón griego en la tercera posición de la tabla clasificatoria.
"Construiré el Olympiacos desde el inicio y haré el equipo que todos estamos soñando. Los aficionados y yo ya hemos aguantado bastante. Se marchan hoy y se van de vacaciones", dijo Marinakis a sus jugadores según la prensa griega.
El dirigente habría añadido que muy pocos jugadores disputarán los últimos tres partidos de la temporada, sustituyéndolos por futbolistas del filial.
"Ellos aman al Olympiacos y a sus hinchas mucho más que vosotros(...) Solo pensáis en la bellas casas en las que vivís y en los coches y no os preocupa el equipo", insistió Marinakis, que dijo que el dinero de la multa lo invertirá en pagar las sanciones por jugar con los futbolistas del filial.
"Pago millones para que lo tengáis todo. Por vosotros he despedido a tres entrenadores y al final parece que vosotros erais los responsables", había añadido Marinakis.