El Manchester City, gracias al lanzamiento de penaltis tras el empate obtenido en el King Power Stamdium con el Leicester 1-1 se situó en las semifinales de la Copa de la Liga de Inglaterra.
El error en los once metros de Jamie Vardy y de Riyad Mahrez, los hombres que habían revitalizado al conjunto de Claude Puel, propiciaron que el cuadro de Pep Guardiola se mantenga como aspirante al trofeo.
El City, plagado de suplentes y de jóvenes futbolistas, entre ellos el español Brahim Díaz y Phil Foden, de 18 y 17 años respectivamente, se adelantó en el marcador antes de la media hora, en una acción gestada por el alemán Ilkay Gundogan que culminó el portugués Bernardo Silva.
A la hora de juego Claude Puel dio entrada a Mahrez y a Vardy, que comenzaron en el banquillo. Aún así, el City mantuvo el tipo. Solo un penalti señalado en el minuto 7 del descuento, transformado por el delantero centro, dio vida al Leicester, que llevó el partido a la prórroga.
El desenlace fue desde los once metros. El Manchester anotó cuatro y el Leicester solo tres. El cuadro de Guardiola se situó en semifinales.