Monumental Plaza de Toros México. Final de las novilladas sin picadores “Soñadores de Gloria”. Mano a mano entre dos hidrocálidos. Miguel Aguilar, acompañado por su hermano, el matador Mario Aguilar y el también matador Héctor de Granada; y Roberto Román acompañado por el matador Cesar Pastor.
Mejoró un poco la entrada donde lució el sol y no se presentó nada de viento.
También ocurrió un mano a mano ganadero con erales de la procedencia Parladé, de la línea Domecq criada en México. Tres erales de La Joya criados en Tlaxcala por la Familia de los herederos de Don José González Dorantes y por la otra parte, tres erales de Santa María de Xalpa criados en Dolores, Hidalgo por el siempre amable Don Benigno Pérez Lizaur. 2°, 3° 5°. Los de La Joya; 1°, 4° y 6°.
Juego del ganado 1° bueno con la cabeza suelta, palmas en el arrastre. 2° se desplazó sin clase 3° débil y complicado 4° muy bravo 5° complicado, 6° con movilidad sin clase.
Detalles de mucha clase de Miguel Aguilar quien le pudo a su novillo que abrió plaza y lució especialmente por naturales ligando con facilidad sus muletazos. Falló con los aceros y se fue de vació y sólo saludar en el tercio. Pudiese haber dado una merecida vuelta de haber matado a la primera intención. Ante su segundo trató de meterlo a su muleta y a pesar de su voluntad no tuvo lucimiento que buscaba. Alargó su faena en demasía. Otra vez falló con el estoque y escuchó un aviso. Con el quinto pegó un buen quite por gaoneras y de muleta tuvo muy poco pues el toro nunca bajó la cabeza, Escuchó dos avisos, dejando buen sabor de boca en esta plaza.
El también hidrocálido Roberto Román también tuvo mucha entrega y mostró valor a raudales aunque menos técnica. El eral tenía poca coordinación en su trote y terminó por dejarse torear. Pésimo con el estoque y escuchó dos avisos salvándose de que se le fuera a los corrales. Ante su el cuarto, un eral con bravura, sacó la casta y le plantó cara, y ante sus escasos recursos, le acabó pudiendo y fue agradecido por los tendidos. Otra vez rodó por la arena y se salvó de milagro de un percance serlo. Falló con el acero quedando muy deficiente su estoque y se tuvo que conformar con escuchar una ovación con leve petición de oreja que no fue concedida. Con el que cerró plaza Roberto Román a pesar de que tenía movilidad, no se acomodó. Escuchó palmas.
Vimos dos novilleros interesantes que habrá que dejarlos madurar para presentarlos la próxima temporada ya con picadores. Son buenos prospecto que han sido llevados en sus carreras sin excesos. Esperemos sigan aprendiendo y no los quieran adelantar es su aprendizaje como prometedores novilleros.