El alemán Sebastian Vettel de Ferrari ya consiguió su primer triunfo en México. En una convivencia organizada por el banco Santander, el germano hizo equipo con uno de los clientes para manejar en el Autódromo Hermanos Rodríguez a través del simulador y se quedó con la victoria, con mejores tiempos que sus compañeros de escudería, el finlandés Kimi Räikkönen, y los conductores de pruebas, el italiano Antonio Giovinazzi y el español Marc Gené.
Pero al alemán no le basta solo con imponerse el domingo en el Autódromo Hermanos Rodríguez para mantener con vida la lucha por el campeonato de pilotos de la Fórmula Uno, también necesita que su rival, el británico Lewis Hamilton, de Mercedes, termine debajo del sexto lugar.
A pesar de los 66 puntos que lo separan del inglés, el cuatro veces campeón del mundo no da el título por perdido y afirmó que seguirá luchando.
"No está decidido, aunque obviamente no está en nuestras manos como nos gustaría, ha sido un buen año, nadie esperaba que estuviéramos tan fuertes desde el inicio de la temporada, ni a la mitad, ni al final; la desgracia es que en un par de carreras no pudimos pelear, lo hubiera hecho incluso con tres llantas", señaló, en referencia a los Grandes Premios de Singapur y Japón, donde tuvo que abandonar.
Pero el alemán, quien llegó a la escudería en 2015, después de estar seis años en Red Bull, defendió el trabajo de la escudería para ponerlo en posición de pelear con Hamilton e incluso encabezar el campeonato, hasta agosto, al salir del Gran Premio de Bélgica.
"Queremos ganar las últimas tres carreras y creo que lo podemos hacer, es nuestra meta, y luego veremos qué pasa, pienso que el equipo ha hecho un trabajo increíble para que estemos donde estamos, nadie lo esperaba y les hemos demostrado que estaban equivocados".
A pesar de no dar por descontada esta temporada, el piloto de Ferrari aseguró que dentro de la Scuderia ya saben lo que deben corregir de cara al 2018, para ser una opción real al dominio de Mercedes en la máxima categoría a lo largo de las últimas cuatro temporadas.
"Todavía hay cosas que podemos hacer mejor, pero ahora sabemos dónde atacar, nuestras debilidades, algunas cosas cambiarán rápido, algunas tomarán un tiempo, pero si lo solucionamos, seremos un equipo más fuerte, capaz de construir un gran auto y un paquete más poderoso, debemos trabajar; seguimos creciendo como equipo, construyendo una cultura, eso nos ha ayudado a dar grandes pasos en los últimos tres años", explicó.
LA ESPINITA DE MÉXICO
Vettel no ha tenido éxito en el Autódromo Hermanos Rodríguez en los dos Grandes Premios anteriores disputados ahí. En 2015 tuvo que abandonar, después de 50 vueltas, ya que golpeó el muro al salir de una curva, y la temporada anterior terminó cuarto, pero con la sanción de Max Verstappen (Red Bull), ascendió al tercero, antes de también ser castigado por un choque con Daniel Ricciardo (Red Bull), que terminó con un lugar en el podio.
"Hace dos años chocamos, el año pasado tuvimos esa pelea por el podio, pero hemos sido veloces, me gusta el trazado, no es fácil tener todo a la perfección, los autos, a pesar de tener la mayor cantidad de carga aerodinámica, son difíciles de manejar, es algo similar a Monza (Italia), pero tienes más curvas, así que veremos, espero una carrera tranquila esta vez, sin problemas, y esperamos subir al podio", afirmó.
Durante la convivencia, Gené recordó que el último conductor de Ferrari que ganó el Gran Premio de México fue el francés Alain Prost en 1990, dos años antes que la carrera abandonara el país, para regresar hasta el 2015.