Monumental Plaza de Toros México. 1ª novillada sin picadores. Estupendo ganado de Las Huertas criados el Rancho La Herradura en Nopala de Villagran, Hidalgo, por un heredero de cuarta generación de la célebre familia Barroso. 1° muy bueno que fue a más 2° igualmente bueno 3° otro bueno 4° con casta pero se quedaba corto 5° un novillo repetitivo 6° también destacado que recibió los honores del arrastre lento. Sin embargo, el mejor, fue el que abrió plaza.
El primero en turno fue el novillero de San Luis Potosí, Ricardo de Santiago se vio solvente tanto de capa, banderillas y muleta. Falló con los aceros y perdió todo lo bien que se vio. Escuchó un aviso. Aplausos para el toro en el arrastre. Con su segundo en el tercio de quites, sufrió un aparatosa voltereta en la que acabó hasta por convulsionar en la arena. Y así, en cuanto recobró el sentido se liberó de los monosabios que lo llevaban a la enfermería y regresó a la cara del novillo y hasta lo banderilleó. Con la muleta trató de someter a un novillo complicado que se terminó por rajar. Mató de bajonazo y espadazo tendido. Se retiró en silencio en ambos.
El moreliano Isaac Fonseca sorteó un gran lote. Su primer novillo se le fue para arriba; pedía a gritos un novillero con más sitio. Mató de una entera que tardó en doblar y el Juez le otorgó una oreja un tanto dividida. Al quinto lo recibió en los medios y corrió con mucha suerte al no ser prendido de gravedad, pues el toro se frenó antes de llegar a su capote. De muleta lo vimos entre altibajos. Escuchó un aviso antes de fallar con descabellos. Su tarde fue poco lúcida a pesar de que cortó una oreja. No ha aprendido a realizar faenas por debajo, le da más importancia al toreo por alto sin fajarse a sus novillos.
El hidrocálido Héctor Gutiérrez demostró que está puesto ante la cara de sus novillos. El primero era un cromo muy parejo de hechuras que hizo una hermosa salida y tuvo un buen comportamiento. Mató de certero pinchazo en hueso y un infame bajonazo. Escuchó un aviso al eternizarse a matar. Con el que cerró plaza, el novillo le permitió torearlo de largo y así lo hizo; Si algo se le puede criticar es que como es muy alto, retuerce en demasía su tronco, lo que para algunos desluce y a otros les gusta un muletazo más largo. El toreo como la vida: En gustos se rompen géneros. Cortó una oreja y dio vuelta al ruedo con el ganadero, que fue quien más mérito tuvo esta tarde.
El próximo domingo la empresa anuncia al hidrocálido Miguel Aguilar, el queretano Juan Pedro Llaguno y al moreliano Tato Loaiza con ganado de Caparica, propiedad de Roberto Viezcas y los hermanos Muñozcano.
La temporada inició con el pie derecho y esperamos que así siga.