Tras dar la bienvenida al meta argentino Willy Caballero, el zaguero alemán Antonio Rüdiger, el centrocampista galo Tieomué Bakayoko y el delantero español Álvaro Morata, el técnico del Chelsea, el italiano Antonio Conte, quiere añadir a sus filas a dos jugadores con nacionalidad inglesa. De esta forma, el preparador pretende garantizar el cumplimiento de una norma de la Premier League que deja claro que entre los 25 integrantes de una plantilla tiene que haber un mínimo de 8 jugadores nacionales.
En concreto, el par de futbolistas solicitados por el transalpino es el conformado por el mediocentro ofensivo Ross Barkley (Everton, 23 años) y el versátil interior diestro Alex Oxlade Chamberlain (Arsenal, 23), dos futbolistas que podrían terminar exigiendo un gasto de, según cuenta el diario The Sun, nada menos que 50 millones de libras (alrededor de 55 M€). Esta considerable inversión se debería al hecho de que sus respectivos equipos sólo dejaran partir a sus pupilos si reciben una oferta de esas que se consideran como irrechazables.
Para Barkley, aterrizar en Stamford Bridge representaría un oportunidad de poner a prueba su talento lejos del entorno en el que ha desarrollado casi toda su carrera profesional. A Oxlade, por su parte, el cambio le otorgaría la posibilidad de dar un neuvo impulso a una trayectoria que parece algo estancada en los últimos tiempos (el pasado curso sólo fue titular en 16 choques de Premier League).