Lo de Beto Da Silva es increíble. El delantero nacional volvió a presentar molestias musculares y tuvo que abandonar el entrenamiento del Gremio con una mano tomándose la parte posterior del muslo izquierdo, nada más apenas 11 días después de haberse recuperado totalmente de una lesión, precisamente en esa zona, que lo había mantenido alejado de los campos por semanas.
Según informa 'Globoesporte', hacia el final de las prácticas, y durante el partido de entrenamiento, Da Silva intentó un contraataque por el centro del campo, pero de inmediato se detuvo, se tomó el muslo izquierdo, y se dirigió hacia la línea lateral del campo. Pasó al lado de su técnico, Renato, a quien no quiso ni mirar y se marchó a los vestuarios.
Las lesiones, sin duda, le han impedido a Beto desarrollarse profesionalmente desde que llegó a Gremio, con el que debutó oficialmente a finales de mayo, en el encuentro ante Sport Recife por el Brasileirao.
Sin embargo, dos semanas después de su estreno, se lesionó del muslo izquierdo, durante un encuentro de preparación entre el primer equipo del Gremio y la categoría Sub 17.
Y tan solo hace unos días, el propio jugador se había encargado de publicar su mejoría a través de sus redes sociales.
"Feliz por jugar 90 minutos después de mucho tiempo y estar a disposición del equipo", escribió en su Instagram acompañando la publicación con una foto del encuentro que terminó empatado sin goles.
Lastimosamente para él, este viernes, al parecer, recayó de la misma lesión, o al menos se trata de la misma zona. Su club aún no se ha pronunciado sobre la gravedad de su estado.