Novak Djokovic, que se encuentra en la capital de España para disputar el Mutua Madrid Open, no ha dudado en posar con casco y chaqueta de bombero acompañado de una docena de miembros del cuerpo, profesión de la que es admirador su hijo, con el que ha mantenido una conversación por videoconferencia para mostrarle dónde estaba.
La inesperada visita fue al mediodía cuando el tenista serbio, que está a punto de ser padre por segunda vez, viajaba en un coche por la calle de Alcalá y al ver el portón del parque de bomberos abierto pidió que detuvieran el vehículo y entró en las instalaciones, para regocijo de los bomberos que estaban de guardia, quienes lo reconocieron al instante y que apenas se lo podían creer.
A continuación, Djokovic ha sacó un móvil y ha llamado a su hijo, con el que, a través de videoconferencia, le ha explicado que estaba en un parque de bomberos madrileño (el número 2).
Los bomberos han inmortalizado el momento y no han perdido tiempo en difundirlo por las redes sociales.