Un árbitro fue agredido en el futbol noruego por un aficionado mientras se disputaba el partido entre Kongsvinger y el Ranheim.
El encuentro estaba igualado a cero goles y a punto de terminar, cuando un hincha saltó desde las gradas y lanzó pintura en aerosol roja a la cara de Ole Andreas Skogsrud Haukasen, abanderado del juego.
Según informes, el agresor fue detenido por la policía y su nombre permanece en secreto.