Bien dicen que los equipos trascienden se arman y fortalecen de atrás para adelante. Esta teoría la lleva a cabo al pie de la letra Hernán Cristante, entrenador del Toluca, que ha consolidado a los Diablos Rojos como el cuadro, hasta el momento, con mayor cantidad de puntos (21) y con un despliegue de juego equilibrado y funcional, brindándole seguridad en defensa y priorizando esta línea. Dentro del actual plantel, solo cuatro de todos los elementos, de este sector, han completado todos los minutos disponibles; hoy, el liderato general, se debe en gran medida a estos pilares.
Todo comienza en el arco. Cristante, que conoce y de sobra los secretos de la portería, ha brindado total confianza a Alfredo Talavera. El veterano guardameta (34 años), ha sido pieza clave del buen paso de los escarlatas; has ahora ha recibido once anotaciones, colocando al Toluca como la quinta mejor defensiva del certamen, a dos tantos de Tigres, el equipo con menos anotaciones recibidas. Tanto en el Nemesio Diez, como cuando juegan fuera de casa, los dirigidos por Hernán han sido un cuadro que no recibe tantos goles: como local, seis; de visitante, cinco.
Con ocho años en la institución, Talavera es de los últimos referentes de los Diablos, pero no solo eso, sigue siendo fundamental para el óptimo avance del club. "Alfredo siempre se ha distinguido por ser un arquero muy seguro, que sabe salir jugando con los pies, y eso le convierte en un futbolista muy completo", ha dicho Juan Carlos Osorio, entrenador de la selección nacional, que le ha convocado a lo largo de su gestión, pues al parecer, la plaza de titular de cara a la Copa del Mundo de 2018, se definirá entre Tala y Guillermo Ochoa.
Aunque este es su primer semestre en el Estado de México, Efraín Velarde, otro de los pilares del líder general, se ha adaptado de inmediato a lo que Cristante exige; llegó procedente de León, donde su actividad vino a menos, pero vestido de escarlata, Chispa ha recobrado la velocidad y seguridad de sus mejores años, juega como lateral y central por izquierda, y aunque sus funciones son más de un marcador que ir al ataque, en este torneo ha dado muestra de que puede sorprender en los linderos del área enemiga y desde ahí intentar un disparo de media distancia.
Por la lateral derecha, Rodrigo Salinas, que llegó también para este año al feudo del Toluca, se ha convertido en uno de los líderes en cuanto a minutos jugados por cuenta de los Diablos; arribó a la capital del Estado de México en medio de la polémica que vivió en Atlas el semestre anterior, luego de recriminar una modificación en su sueldo y ni él, esperaba que la continuidad fuera tanta con Cristante: "He vuelto a sentirme un futbolista profesional otra vez, disfruto lo que estoy haciendo y los resultados nos han acompañado, afortunadamente". Su aporte ha sido tan significativo, que más allá de las labores defensivas, ya suma un tanto a su nombre.
En su segundo certamen, dentro de su segunda etapa como diablo, el chileno Osvaldo González es otro de los bastiones de Toluca y Cristante. Se desempeña como un volante de contención defensivo, cuya principal virtud es darla equilibrio a la oncena, robando el balón al rival y brindando la salida primaria desde atrás; el andino ya había prestado sus servicios para el equipo, entre 2010 y 2011, pero había vuelto al futbol de su país, con la Universidad Católica. En el presente, ha dejado en claro su valía.
Toluca, más allá del correcto funcionamiento en casi todas sus líneas y de los futbolistas claves como los mencionados, tiene un par más de argumentos dentro del terreno de juego. Cristante cuenta con la experiencia de Antonio Naelson Sinha, su relevo habitual, para abrir a cualquier rival; a sus 40 años sigue siendo revulsivo y de momento ya registra dos asistencias en 240 minutos. Fernando Uribe es el hombre gol del equipo, con cuatro conquistas en 10 compromisos.
NO PESAN AUSENCIAS
Pese a las bajas de Enrique Triverio y Rubens Sambueza, ambos suspendidos por la Comisión Disciplinaria, aunque con distintas sanciones y con todo y que en el seno del equipo no tomaron de manera serena las ausencias, las mismas no han pesado en función del colectivo. El mérito ha sido de Hernán Cristante, que gracias a un esquema que permea el equilibrio, para reemplazar eslabones primordiales. Con el líder general no pesan las ausencias.