Transcurría recién el segundo punto del partido entre las rusas Anastasia Potapova (23° del ranking mundial) y Mirra Andreeva (102°), cuando se vivió un momento bastante particular en la tercera ronda de Wimbledon: antes del saque de Potapova, el umpire brindó unas palabras que llamaron la atención de todos.
"Damas y caballeros, si están abriendo un champagne, no lo hagan mientras las jugadoras están por servir", dijo el árbitro del match, causando la sonrisa y los aplausos de la propia Anastasia y de todo el público presente en la cancha 3 de Wimbledon. Sin dudas, será uno de los momentos recordados de esta edición del Grand Slam británico.
Después de este gracioso suceso, el encuentro siguió con su recorrido y la joven Andreeva, de ¡16 años!, se impuso por 6-2 y 7-5 y avanzó a los octavos de final del major sobre césped, siendo este el primer torneo de su carrera sobre esta superficie. Ya anotó su apellido entre las mejores 80 del ranking WTA y va por más.