Ana Guevara tomó la Conade el 13 de diciembre del 2018 y hasta la fecha se le han sumado enemigos públicos que en un principio apoyaron su gestión, y creyendo que ella los apoyaría tras haber vivido en carne propia las necesidades que tienen como deportistas, pero con el tiempo se han decepcionado y han arremetido contra la ex velocista.
La ex clavadista Paola Espinosa en su momento apoyó la llegada de Guevara, sin embargo, la doble medallista olímpica comenzó a ponerse en contra de la directora de la Conade cuando Ana le pidió que en sus redes sociales apoyará una campaña a su favor en el momento que salieron a la luz los desvíos de recursos federales y que señalaban a la titular del organismo. Paola no aceptó y poco a poco comenzó a ser bloqueada por Guevara.
También la nadadora Liliana Ibáñez apoyó en un principio a Ana Guevara, e incluso en el 2019 la deportista recibió un aumento de su beca deportiva de 18 mil pesos a 30 mil pesos, y a pesar de que tenía actividad competitiva por una lesión en el hombro izquierdo, y ese apoyo fue cuestionado por deportistas y hasta por legisladores. El encanto se terminó cuando la Conade le quitó la beca a Ibáñez por no haber clasificado a Tokio 2020, y le ofrecieron la de seis mil pesos, una cantidad que no aceptó ya que prefería tener libertad de la Conade y tener un camino tranquilo rumbo a París 2024.
Recientemente Paola Longoria arremetió contra la Conade por no haber tenido apoyo para enfrentar el Campeonato Mundial que se realizó en agosto en San Luis Potosí, y donde Longoria obtuvo si quinto título. Ana Guevara le respondió que la falta de apoyos se debió a que no ha comprobados recursos por un monto de 1.6 millones de pesos.
La esgrimista Paola Pliego también se puso en contra de Ana Guevara luego de indicar que había mucha corrupción en el organismo, e incluso en el 2019 comenzó a competir por Uzbekistán. Pliego también fue parte de las atletas que apoyó a Guevara a su llegada a la Conade, pero se fue decepcionada de México.
“Te quedaste en el discurso, cuando eras nuestra esperanza. Prometiste ayudarnos y lo creímos, pues conoces el valor del esfuerzo, del trabajo y del sudor… Me decepcionaste terriblemente con la falta de empatía. Espero equivocarme, nunca es tarde para rectificar”, dijo Pliego en ese año.
Incluso durante la etapa fuerte de la pandemia, muchos deportistas se quejaron en una reunión en la Cámara de Diputados de la falta de apoyo de la Conade. Por ejemplo, el clavadista Jahir Ocampo comentó ahí que desde hace un año no tiene contacto con la Conade.
"No hay un sistema deportivo, por lo que cada atleta entrena por su cuenta. Entreno en un club privado en Querétaro costeado con mis propios recursos, y la alcaldía de Benito Juárez, en la Ciudad de México, me ha permitido entrenar en la Alberca Olímpica a puerta cerrada”, señaló.
También hay atletas que se han quejado con la Conade por la preferencia que tiene con otros deportistas, como fue el caso de la pentatleta Tamara Vega, quien en sus redes sociales subió un video indicando que le sorprendía no tener apoyo para ir a una competencia, y que tuviera preferencia otra atleta sin mencionar nombre, pero poco después ese video fue borrado por la propia atleta.
Posiblemente hay más atletas activos que están inconformes con el organismo que dirige Ana Guevara, sin embargo, ahora ya no pueden expresarse libremente tras la regla de la carta compromiso donde no les permiten hablar mal en redes sociales del organismo, o perderán su beca. “Ser responsable por todas las declaraciones que emita en cualquiera de las redes sociales en las que me desenvuelvo, no dañaré la imagen institucional y/o cualquiera de los representantes del Sistema Nacional de Cultura Física y Deporte”, indica el documento.