Gordon Hayward ya empezó el largo recorrido para volver a jugar en la NBA después de sufrir una horripilante lesión en una pierna.
El alero de los Celtics de Boston dijo el jueves que no tiene un plazo para regresar a la cancha, y señaló que sencillamente está contento por poder volver al gimnasio después de fracturarse la pierna izquierda en el primer partido de la temporada.
Hayward indicó que, por ahora, solo puede tirar sentado en una silla, pero dijo que al menos sostener un balón “es una sensación increíble”.
Hayward firmó un contrato por cuatro años y 128 millones de dólares como agente libre este verán para reunirse en Boston con Brad Stevens, quien fue su entrenador en la universidad. Sin embargo, la ex estrella de Utah se lastimó en los primeros seis minutos del primer partido.
Los Celtics perdieron los dos primeros encuentros de la temporada, pero ganaron seis consecutivos desde entonces.
Hayward indicó que ayudará a los entrenadores del equipo mientras realiza su terapia.
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