LeBron James humilló a cada defensor que Boston le puso enfrente. Y los Cavaliers no perdieron en absoluto ritmo tras el largo descanso, para seguir invictos en esta postemporada.
James totalizó 38 puntos, nueve rebotes y siete asistencias para que Cleveland aplastara 117-104 a los Celtics en el primer partido de la final de la Conferencia del Este.
"Está jugando a un alto nivel, y ése es el motivo por el que nos estamos apoyando tanto en él", dijo el entrenador de los Cavs, Tyronn Lue. "Cuando LeBron juega a ese nivel, los otros sólo tienen que mantenerse sólidos y tenemos buenas posibilidades de ganar".
Tras una inactividad de 10 días, James y los Cavs tomaron rápido una delantera a la que nunca renunciaron.
"No podemos meternos en un agujero tan profundo como éste contra ellos", lamentó el técnico de Boston, Brad Stevens.
Kevin Love impuso su mejor cifra en playoffs, con 32 puntos, además de capturar 12 rebotes por los Cavs, que mejoraron a una foja de 9-0 en esta postemporada. Cleveland abrió los playoffs del año pasado con un récord de 10-0 antes de proclamarse campeón de la NBA.
James anotó a placer en la primera mitad y los Cavs edificaron una delantera de 26 puntos. Love abrió espacios para James, atinando tiros de media distancia y obligando a que Boston marcara al astro de Cleveland sólo con un hombre en varias ocasiones.
Avery Bradley y Jae Crowder encabezaron a los Celtics con 21 puntos por cabeza. Isaiah Thomas agregó 17 unidades, en tanto que el dominicano Al Horford sumó 11 puntos, ocho rebotes y seis asistencias.
Boston erró 11 de sus primeros 14 disparos.
El segundo encuentro de la serie está programado para el viernes en Boston.
Love promedió apenas 13,8 puntos por encuentro en las primeras dos rondas de la postemporada. Despertó ante un equipo de Boston que lo dejó fuera de los playoffs en 2015, cuando Kelly Olynyk le dislocó un hombro.
El alero dejó claro que la articulación está recuperada y la puntería también. Acertó desde la pintura y desde el perímetro.
La situación se tornó algo tensa en el tercer periodo, cuando Marcus Smart, de Boston, y Tristan Thompson, de Cleveland, se retaron y debieron ser separados por los árbitros. Continuaron los altercados brevemente, antes de que James interviniera para alejar a Thompson.
En la jugada, se marcó doble falta técnica a Smart y Johnson. Sin embargo, hubo un nuevo roce entre ambos unos minutos después.
Smart cayó al piso, y se sancionó una falta a Thompson.
Los Celtics se mostraron acicateados por el conato de riña, y cerraron el tercer periodo con una racha de 11-3 para acercarse a 92-75.
Pero los Cavs restituyeron pronto su delantera de 20 unidades.