Dustin Johnson se retiró el jueves del Masters de golf tras sufrir una lesión en la espalda en una caída en la casa que alquiló para la semana.
El número uno mundial llegó al Augusta National en una excelente racha, habiendo ganado sus últimos tres torneos. Pero no tuvo siquiera un golpe en el primer torneo Grand Slam del año.
"Yo quiero jugar", dijo Johnson. "Pero simplemente no puedo hacer swing".
Ciertamente trató, al llegar al campo dos horas antes de su arranque programado en el último grupo de la primera ronda, con el dos veces ganador del Masters Bubba Watson y el ganador del Campeonato PGA Jimmy Walker.
Johnson hizo algunos swings fáciles en el área de prácticas, regresó para recibir más tratamientos y entonces sacó los irons y el driver, a ver si la espalda aguantaba.
Pero claramente sentía dolor, frotándose la espalda varias veces y dejando que al caddie colocase la pelota para no tener que agacharse. Tras una larga conversación con su entrenador, Butch Harmon, Johnson comenzó a caminar hacia el primer tee.
Su intención era jugar. Pero la espalda no le dejó.
"Hice todo lo posible para jugar", dijo. "Anoche me puse hielo, calor, hielo. Estuve despierto casi toda la noche para tratar de estar listo para hoy. Me trataron toda la mañana. Obviamente, puedo hacer algunos swings. Pero no puedo hacer mi swing normal".
Su lesión sacó de la competencia a uno de los favoritos para colocarse la chaqueta verde.
Johnson se lesionó el miércoles por la tarde cuando sufrió lo que su agente describió como "una caída seria" por una escalera.
Lesiones accidentales ajenas al deporte no carecen de precedentes en el golf.
Hace dos años, Rory McIlroy staba jugando fútbol cuando sufrió un desgarrón de ligamentos en la rodilla izquierda unas pocas semanas antes de hacer la defensa de su título en el Abierto Británico en St. Andrews como número uno mundial.