Así, concentrados entre la Plaza de Armas y Miraflores, los hinchas celebraron cada gol que hizo la Selección durante el partido con Australia.
Los fans, en su fervor y emoción por la última participación de Perú en el Mundial de Rusia 2018, hacían de todo por un gol, algunos rezaban, otros saltaban y otros cantaban, todo entre lágrimas y gritos de emoción. Ni el frío ni faltar al trabajos para algunos, les impidió estar presentes con la Selección.
Las camisetas rojiblancas se lucían con orgullo y algunos se animaron a mandarle un saludo a Doña Peta, madre del capitán de la Selección. “Estate contenta Peta, porque valió la pena que tu hijo esté ahí, y todos lloramos, qué bien”, dijo un hincha emocionado.
Otros, pedían a gritos que ‘El Tigre’ no se fuera y se quede entrenando a la Selección. “Por favor, no se vaya”, le piden unos, otros corean a una misma voz, “Gareca no se va”.
Sin embargo, esta eliminación nos deja sentimientos encontrados, tristes por el fugaz paso por Rusia, pero felices y orgullosos porque sí se pudo y convencidos que en cuatro años sí se podrá.