El ‘tic-tac’ continúa con su inevitable marcha para el momento del debut de la selección mexicana en el Mundial de Rusia 2018. Antes de medirse a los alemanes en Moscú, el cuadro de Osorio jugará tres partidos más como preparación para la gran justa.
Por esta línea, el cuadro dirigido por Juan Carlos Osorio depende mucho de los momentos individuales que vivan cada uno de los jugadores que conformarán la lista final de 23 convocados para la Copa del Mundo; sin embargo, de todos estos, los elementos que mayor ilusión causan a la afición en estos instantes son los siguientes.
Hirving Lozano
Sin duda, el ‘Chucky’, es el mejor jugador mexicano del momento, al incursionar de manera impresionante en el PSV Eindhoven, teniendo un debut similar al que tuviera Ronaldo en este equipo.
Las condiciones y la calidad que atañe actualmente el ex futbolista del Pachuca, lo hacen un jugador más que indispensable para el funcionamiento del equipo de media cancha hacia adelante. Si todo va de acuerdo a la lógica, Lozano tendría que ser titular indiscutible en Rusia 2018.
Carlos Vela
Quizá el jugador más pensante de este equipo; el que mueve los hilos y sabe genera juego de forma muy importante para la selección mexicana, es Carlos Vela.
Junto a Hirving Lozano, Vela se vuelve otro jugador medular para el sistema de Osorio. Aunque se piensa que ha bajado de nivel, luego de su llegada a la MLS con el LAFC, el ex jugador del Arsenal es –quizá- el elemento más completo del ‘Tri’.
Héctor Herrera
Uno de los elementos que igualmente tienen que ser inamovibles, esta vez en el centro del campo, es Héctor Miguel Herrera, quien ha levantado su nivel y ha ido estableciéndose como un jugador importante en el Porto durante el cierre de temporada.
A pesar de haber sufrido lesiones en la última convocatoria, Herrera es un jugador que aporta mucho juego, un vértice en el medio centro del equipo mexicano, con gran pegada y con buenas condiciones ofensivas.
Andrés Guardado
Experiencia en su máxima expresión; eso es lo que representa Andrés Guardado para la selección mexicana, esto tras haber tenido una muy buena campaña con el Betis.
Irá por su cuarta Copa del Mundo, convirtiéndose, por su nivel, en un elemento indiscutido en la mitad del terreno de juego, haciendo comparsa con Héctor Herrera.
LOS CONSOLIDADOS
Por otro lado, están los llamados jugadores ‘Clásicos’ de esta selección; lo que prácticamente, a no ser a la espera de una sorpresa, son los que –en teoría- no deberían faltar en la lista final para el Mundial. Estos jugadores ya han demostrado su nivel y aporte en ocasiones anteriores en la selección.
Guillermo Ochoa
Actualmente jugando en Bélgica, se podría esperar que el ex arquero del América vuelva a ser el titular bajo los tres postes de la selección mexicana en Rusia 2018.
A pesar de ser el guardameta que fue goleado en la Copa América, por Chile, y en la Copa Confederaciones, por Alemania, se ha ganado la total confianza de Juan Carlos Osorio.
Javier Hernández
Quizá, ya desde hace tiempo, Javier Hernández no tiene el nivel que en alguna ocasión mostró con el Manchester United o con el Bayer Leverkusen. No obstante, es uno de los jugadores que más conecta con la afición, esto debido a su carisma y al recuerdo del que aún vive.
José de Jesús Corona
En ocasiones se le ha recriminado por su conducta violenta dentro y fuera del campo, pero estas han sido opacadas por el nivel que casi siempre muestra, ya sea como arquero del Cruz Azul y de la selección mexicana.
Como es de recordarse, en 2014 se esperaba que Corona fuera el titular bajo el arco de la selección mexicana, pero de última hora esto cambió. Desde entonces, le ha costado hacerse del puesto principal en el combinado nacional, aunque sigue siendo uno de los jugadores más constantes en las convocatorias, sin dejar de lado que fue una de las piezas clave para la obtención de la Medalla de Oro en Londres 2012.
Oribe Peralta
Otro elemento con gran experiencia, del que incluso aún se especula su posible llamado para el Mundial de Rusia, es Oribe Peralta.
Quizá ya no es el delantero del 2014, pero sigue cumpliendo de forma cabal, ya sea con tantos importantes en momentos de presión o con la colaboración al juego y asistencia de sus compañeros.
Su aporte en el equipo, más allá del tema cancha, es lo que puede transmitir para el grupo en general. Ayudar a hacer buen vestidor y fungir como líder.
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