En un giro inesperado en el conflicto entre Israel y Palestina, las fuerzas israelíes han reanudado sus ataques aéreos sobre Gaza, rompiendo el cese al fuego que había logrado reducir temporalmente la violencia. Esta ruptura, que había sido acordada para mitigar las tensiones y las pérdidas humanas, ha provocado ya la muerte de cientos de personas, principalmente civiles palestinos, dejando a Gaza sumida en un caos aún mayor.
El apoyo de Estados Unidos a las acciones israelíes ha generado una ola de críticas internacionales, especialmente hacia las potencias occidentales, acusadas de respaldar sin reservas a Israel. En un conflicto que ha costado miles de vidas, este nuevo estallido de violencia siembra dudas sobre la viabilidad del proceso de paz y la estabilidad futura de la región.
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Israel ataca a Hamás y pone fin al alto el fuego en Gaza
Más de 400 palestinos han muerto en recientes bombardeos israelíes sobre Gaza, mientras el frágil alto el fuego se encuentra en riesgo. La comunidad internacional sigue con alarma el agravamiento del conflicto.
Las Fuerzas de Defensa de Israel han intensificado sus ataques contra objetivos de Hamás, lo que ha resultado en la muerte de cientos de personas en un solo día. Este aumento en la violencia ocurre después de un breve periodo de calma, que siguió a un acuerdo de alto el fuego en enero, el cual había aliviado temporalmente la tensión tras meses de enfrentamientos.
Según el Ministerio de Salud de Gaza, más de 400 muertos han sido reportados en los últimos ataques, y se teme que el saldo de víctimas aumente a medida que avancen los esfuerzos de rescate. La situación humanitaria es crítica, con la infraestructura devastada y miles de personas desplazadas.
Los esfuerzos internacionales por fortalecer el alto el fuego se ven complicados por esta nueva escalada. Steve Witkoff, enviado especial de Estados Unidos para Oriente Medio, rechazó una reciente propuesta de Hamás, lo que ha incrementado las tensiones en la región.
Israel consultó a EE. UU. antes de lanzar ataques en Gaza, según la Casa Blanca
De acuerdo con Reuters, la Casa Blanca confirmó que Israel consultó con Estados Unidos antes de lanzar los ataques en Gaza. La portavoz Karoline Leavitt destacó el compromiso de Washington en respaldar a Israel contra Hamás y otros grupos considerados terroristas, una postura que ha generado críticas sobre las repercusiones de la política estadounidense en la región.
"La Administración Trump y la Casa Blanca fueron consultadas por los israelíes sobre sus ataques en Gaza esta noche", afirmó la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, en una entrevista con la cadena Fox News.
"Como ha dejado claro el presidente Donald Trump, Hamás, los hutíes, Irán, y todos aquellos que buscan aterrorizar no solo a Israel, sino también a Estados Unidos, pagarán un precio: se desatará el infierno", prometió la portavoz.
Contexto y consecuencias del conflicto con Hamás
La violencia en Gaza no es un hecho aislado. En los últimos meses, el conflicto ha dejado más de 48.500 muertos, y la infraestructura de Gaza está gravemente dañada. La situación se agrava aún más por los recientes ataques estadounidenses en Yemen, que dejaron al menos 53 muertos, intensificando las tensiones en el Medio Oriente.
El presidente Trump ha advertido que aquellos que amenacen a Israel y a Estados Unidos, incluidos Hamás y los hutíes respaldados por Irán, enfrentarán represalias severas. La comunidad internacional sigue observando con creciente preocupación cómo esta escalada podría desestabilizar aún más la región.
¿Qué país es Hamás?
Hamás es una organización político-militar palestina de ideología islamista, pero no debe confundirse con un Estado soberano. Fundada en 1987 durante la Primera Intifada, su origen se encuentra en los territorios ocupados, siendo la Franja de Gaza su principal centro de operaciones. Esta agrupación se define como una resistencia islámica, con el objetivo de crear un Estado palestino en lo que consideran la Palestina histórica, que incluye territorios que actualmente son parte de Israel.
Además de su actividad política y social, Hamás posee un brazo armado, las Brigadas de Ezzeldin Al-Qassam, y ha estado implicada en numerosos enfrentamientos con Israel. Varios países y organismos internacionales la catalogan como una organización terrorista, aunque otros la ven como un movimiento de resistencia legítimo. Desde 2007, Hamás controla la Franja de Gaza, después de ganar las elecciones palestinas de 2006 y librar un conflicto armado contra el grupo Fatah. En resumen, Hamás es una fuerza clave en la política palestina con gran influencia en Gaza, pero no posee estatus de país soberano.