El 2022 marcó un récord histórico en la población de Estados Unidos, nacida en el extranjero. Según un estudio demográfico del Centro de Investigación Pew, publicado a mediados de este año, el número de ciudadanos estadounidenses nacidos en otro país alcanzó la cifra récord de 46.1 millones. Esto quiere decir que, los inmigrantes representaban hasta hace dos años el 13.8% de la población estadounidense, siendo tres veces más que el promedio registrado desde 1970.
De los 46.1 millones, el 77% de ellos estaban en el país de manera legal. El 49% eran permanentes legales y el 4% eran residentes temporales legales. El resto (11 millones de personas) eran inmigrantes no autorizados.
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Aunque los datos corresponden únicamente a los primeros dos años de la administración de Joe Biden y, por lo tanto, no son los más recientes, sirven para contradecir las afirmaciones del expresidente republicano y actual candidato presidencial, Donald Trump, quien asegura que la mayoría de los inmigrantes en el país se encuentran de manera irregular.
Inmigrantes no autorizados
Desde hace mucho tiempo, Estados Unidos ha sido el país con la mayor cantidad de inmigrantes provenientes de casi todas las regiones del mundo. Factores como las crisis climáticas, violaciones graves de derechos humanos, altos niveles de violencia y la pobreza en varios países han obligado a cientos de miles de personas a dejar sus países en busca del sueño americano. De acuerdo con un estudio realizado por el analista Mohamad Moslimani y el demógrafo Jeffrey S. Passel, la mayoría de estos inmigrantes provienen de México: en 2022, el 23% de los inmigrantes en EE. UU., 10,6 millones de personas, nacieron en México.
Los siguientes países de origen más representados fueron India (6%), China (5%), Filipinas (4%) y El Salvador (3%). Es relevante mencionar que hasta 2007, llegaban más inmigrantes hispanos que asiáticos, pero entre 2009 y 2018 ocurrió lo contrario. Sin embargo, desde 2019, la inmigración desde América Latina ha vuelto a superar a la de Asia, y los inmigrantes hispanos han retomado el liderazgo como el grupo más numeroso.
Ciudadanía por naturalización
Uno de los principales hallazgos del estudio realizado por Moslimani y Passel es que, en el año fiscal de 2022, casi un millón de inmigrantes legales se convirtieron en ciudadanos estadounidenses por naturalización. Esta cifra se aproxima a los picos históricos alcanzados en 1996 y 2008.
¿Cuál es la diferencia entre ciudadanía y residencia en Estados Unidos?
Aunque la mayoría de los inmigrantes que reúnen los requisitos para la naturalización solicitan la ciudadanía, no todos lo hacen. Las razones principales para no hacerlo incluyen barreras lingüísticas y personales, falta de interés y dificultades económicas. Estos factores fueron señalados en una encuesta realizada por el Pew Research Center en 2015.
Lo que se sabe de los migrantes: destinos, idioma, nivel de educación
La organización con sede en Washington D.C. ha registrado que la mayoría de los 46.1 millones de inmigrantes nacidos en el extranjero viven principalmente en cuatro estados: California (10.4 millones o el 23% del total nacional), Texas (5.2 millones o el 11%), Florida (4.8 millones o el 10%) y Nueva York (4.5 millones o el 10%). Y las mayores concentraciones se encuentran en las áreas metropolitanas de Nueva York, Los Ángeles y Miami.
Las barreras lingüísticas pueden explicar la preferencia. El idioma tiene un papel importante en la integración y facilitar el acceso a servicios esenciales, lo que hace que los estados con enormes poblaciones latinas sean más atractivos para los inmigrantes. El estudio del Centro de Investigación Pew señala que el español es la lengua más hablada por los inmigrantes estadounidenses y, aproximadamente, cuatro de cada diez hablan español en casa, representando un 41%. Además del español, los idiomas que más hablan los inmigrantes en casa son inglés solamente (17%), chino (6%), filipino/tagalog (4%), francés o criollo haitiano (3%) y vietnamita (2%).
Otro factor importante es el nivel educativo de los inmigrantes, que varía según su país de origen. Los investigadores han encontrado que alrededor de la mitad de los inmigrantes de México (51%) no completaron la educación secundaria. Una situación similar se observa en el 46% de los inmigrantes de América Central y el 21% de los del Caribe. Estos grupos también tienen menos probabilidades de poseer un título universitario en comparación con los nacidos en Estados Unidos.
En cambio, los inmigrantes de otras regiones tienen una probabilidad igual o mayor que los estadounidenses nacidos en el país de contar con al menos una licenciatura. En particular, los inmigrantes del sur de Asia tienen la mayor probabilidad de tener un título universitario o superior, con un 72% de ellos alcanzando este nivel educativo.