En una temporada de claroscuros para los Raiders, Maxx Crosby se mantiene como su bastión defensivo. Fuerza, velocidad y agilidad, el ala defensiva de Las Vegas, de 26 de edad, reúne los tres requisitos que buscan las franquicias en un jugador que puede inclinar el juego a su favor. En una Liga en la que las defensivas han definido resultados, el egresado de Eastern Michigan tiene todo lo necesario tiene números que lo respaldan como uno de los mejores de la NFL.
Luego de 10 semanas de temporada regular, Crosby se perfila como un sólido candidato para uno de los máximos galardones a los que se pueden aspirar: Jugador Defensivo del Año. El número 98 del equipo Black and Silver ha sido un elemento destacado a lo largo de la campaña y su nombre resuena junto con el de otros candidatos como Myles Garrett (ala defensiva de Cleveland Browns), Micah Parsons (linebacker de Dallas Cowboys) y T.J. Watt (linebacker de Pittsburgh Steelers).
Las cifras lo respaldan
En estos momentos, Maxx, quien disputa su quinta temporada con los Raiders (jugó como novato en Oakland y le tocó la mudanza a Las Vegas) registra 59 tacleadas –35 solo y 24 con asistencia–, además de que es cuarto en capturas de quarterback (9.5), en las que ha conseguido 59 yardas, octavo en dicho rubro y empatado con Joey Bosa (linebacker de Los Angeles Rams), quien lleva tres capturas menos que el jugador de jersey negro y plata. Sus 35 tacleadas en solitario son la cantidad más alta de la campaña para un jugador que pelea contra los linieros ofensivos en las trincheras.
Crosby también destaca con sus 13 tacleadas para pérdida de yardas, el segundo mejor registro en toda la NFL, solo por detrás de las 14 que tiene Danielle Hunter, apoyador en Minnesota Vikings; el de los Raiders también lleva un pase defendido, un balón suelto forzado y otro recuperado.
Su impacto en el equipo es evidente, al liderar a Las Vegas en capturas por una amplia diferencia –le sigue Robert Spillane con solo 2.5 capturas– y también ubicarse con buenos números a nivel compañeros: es tercero en tacleadas (detrás de las 81 de Spillane y las 59 de Divine Deablo), líder en derribos para pérdida y también en yardas conseguidas en las capturas.
Este 2023, lleva siete partidos con cinco o más tacleadas, además de que su mejor desempeño fue en la Semana 9 ante los New York Giants, en las que consiguió tres capturas que lo tienen en esta situación de brillo. Si mantiene este ritmo, no sería descabellado que consiga 16.5 capturas, con lo que rompería su récord de carrera con contundencia (12.5 en 2022).
Además, es un jugador con gran durabilidad en el emparrillado. El pasado domingo, en la victoria por 16-12 de Las Vegas sobre New York Jets en el Sunday Night Football, Crosby estuvo en el 100 por ciento de las jugadas defensivas, además de que solo se ha perdido dos jugadas en los últimos siete juegos, siendo las dos últimas de la derrota ante Chicago Bears (30-12) del 22 de octubre, en la que el quarterback Tyson Bagent se arrodilló para consumir el reloj.
De acuerdo con las cifras de la agencia AP, Maxx ha participado en el 98.1 por ciento de las jugadas defensivas de los Raiders este año, siendo el liniero defensivo con más actividad. Para poner en perspectiva, el otro jugador de trincheras que le sigue en porcentaje es Aidan Hutchinson, de los Detroit Lions, con un 89 por ciento de participación con su equipo.
Se andan con cuidado
Este domingo, los Raiders buscarán su tercera victoria consecutiva (marchan con marca de 5-5 y 2-0 desde el despido del head coach Josh McDaniels y el interinato de Antonio Pierce) ante Miami Dolphins, que posee la mejor ofensiva del año, pero han batallado para ganarle a equipos con marca ganadora.
Mike McDaniel, el entrenador en jefe de los Dolphins, sabe de qué jugador tiene que cuidarse en su planeación del juego, sobre todo por el historial de conmociones que tiene el mariscal de campo Tua Tagovailoa. “Qué jugador tan genial (es Maxx Crosby), porque saltó a la fama como novato y se creó un nombre desde el principio, lo cual es inusual”, reconoció el lunes McDaniel, después del entrenamiento de su equipo.
"Ha demostrado por qué es el jugador que es, por qué se gana el respeto que merece y continúa evolucionando en su juego, porque es un jugador que tiene un motor implacable y que tiene la capacidad de ganar tanto en carreras como en pases", culminó el head coach.
RGS