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La pena máxima, entonces, fue para los íntimos que tras el empate sin goles en el estadio Nacional perdieron el liderato del Torneo Clausura de la Liga 1 2024 ante Universitario, el clásico rival que se llevó el Apertura hace unos meses. Empatan en puntos (14), pero la ‘U’ tiene mejor diferencia de gol (+9 sobre +5). Y como efecto dominó la igualdad golpeó también a los rimenses que se quedaron relegados en el cuarto lugar con 12 unidades.
En Matute existe una extrema dependencia a Hernán Barcos, el inacabable goleador de 40 años que sigue cargando sobre sus cansados hombros al equipo aliancista. Con el ‘Pirata’ en el campo, el elenco dirigido por Mariano Soso tuvo sus mejores minutos: generó dos ocasiones claras de gol. Pero cuando salió por una lesión muscular, a los 16′, los íntimos cayeron en juego. Peor aún después del penal fallado por Rodríguez.
Si algo se rescata del Alianza de Soso es que intenta ser un equipo intenso y con presión alta, así logró crear peligro en arco rimense. Pero se le hace complicado mantener el ritmo porque cuando tienen la pelota no saben administrarla. Esa obligación recae en el ‘Bigote’ Rodríguez, el que debería ser el conductor. Pero su rendimiento actual dista mucho de lo que mostró en la primera parte del año.
Cristal, por su parte, sufrió la estrecha marca que le pusieron a Martín Cauteruccio, el goleador del año. Si no estaba Carlos Zambrano detrás aplicándole toda su rudeza, aparecían los siempre correctos Noriega y Garcés. El ‘9′ solo tuvo una chance para anotar -y lo hizo- pero estaba en offside. ‘Canchita’ aún no es el de antes, aunque sí está mejor de la versión que mostró en la ‘U’ en el Apertura. Y Santiago González se perdió en medio de un partido jugado al límite, con pierna fuerte e incluso con un conato de bronca en los minutos finales.
Serán seguramente días muy complicados en Matute. Alianza sumó su segundo empate con Mariano Soso en el banco y alarga su agonía de no haberle ganado a los grandes (dos derrotas ante la ‘U’, una caída y un empate ante Cristal). Pero tiene por delante una última chance de retomar la punta. Este martes recibirán a Cienciano en su casa, el estadio Alejandro Villanueva, mientras que cremas (frente Cusco FC en la ciudad imperial) y celestes (ante Melgar en Arequipa) tendrán que salir de Lima. Es la última oportunidad.
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Rodríguez no sabe ser el conductor
Quitemos el penal fallado que puede ser error, pero también virtud del portero. Pero Sebastián Rodríguez jugó su peor partido con Alianza Lima y eso dice mucho. Instalado como ancla en la volante que conforma con los interiores Jesús Castillo y Catriel Cabellos, el ‘Bigote’ nunca pudo ser con conductor del equipo íntimo. Según los datos de Sofascore, apenas tocó 30 balones en todo el partido y dio 17 pases (14 acertados), además perdió la posesión del balón en seis ocasiones.
Con el armador de juego escondido, sin la jerarquía necesaria para hacerse cargo, Alianza sufrió con el balón en los pies (tuvo el 36% de posesión). Los stopper Noriega y Garcés se encargaron de buscar las salidas por abajo, pero mayormente el cuadro íntimo se aferró al juego largo, a los cambios de frente de Freytes para Zanelatto, o los contragolpes tras recuperación.
¿Qué dijo Sebastián Rodríguez por el penal fallado?
"Con respecto al penal, es una situación de fútbol. Me ha tocado patear penal en los otros equipos y nunca había fallado", señaló el volante uruguayo en conferencia de prensa pos partido.
Además de Rodríguez, Catriel Cabellos y Jesús Castillo tampoco destacaron. Cabellos es un todo terrero, pero casi siempre decide mal con el balón en los pies. Y Castillo es más un volante de marca que un atacante más en las jugadas ofensivas. Los ingresos de Cristian Neira y Ricardo Lagos al medio tampoco mejoraron el juego aliancista que en los últimos minutos atacó como pudo, con más corazón que con juego. Y ahí debe trabajar Mariano Soso.
Un ataque sin gol
Es un defecto que ha acompañado al equipo en lo que va del año: la escaza efectividad de cara al arco. Lo analizó Alejandro Restrepo, el anterior técnico, en una entrevista con este Diario antes de irse: “La idea nos ha llevado a generar muchas situaciones de gol y que el equipo tenga claro cómo crear ocasiones de peligro. Lo que sí hemos estado muy dedicados durante estas semanas, tanto con el vídeo como con los entrenamientos, es a mejorar de cara a la finalización”. Y es que Alianza sabe generar peligro, pero no concreta.
Ante Cristal, los íntimos remataron 13 veces (5 a portería), en comparación de los 5 disparos (3) de Cristal. Y aunque Diego Enríquez se encargó de resguardar su arco de manera increíble, los dirigidos por Soso no terminaron bien jugadas que pudieron acabar en gol. Peor aún sin Hernán Barcos, el goleador del año con once tantos, en ataque Pablo Sabbag y Matías Succar no supieron ser los finalizadores que se necesitaba. Eso sí, Succar jugó un buen partido, incluso fue el que generó el penal. Sabbag, por su parte, sigue sin dar argumento alguno para defender su renovación de contrato a inicios de año.
En el segundo tiempo ingresó Kevin Quevedo, quien no empezó las acciones por problemas estomacales, según informaron en la previa del partido en L1 Max. Quevedo tuvo un par de situaciones que tampoco supo resolver. Ni qué decir de los carrileros Freytes y Zanelatto, quienes llegan bien a línea de fondo, pero sus centros casi siempre son muy pasados. Así es difícil.
Atrás todo bien
Mariano Soso ha mantenido el sistema 3-5-2 porque entiende y acepta que la defensa aliancista funciona muy bien. Con Zambrano mostrando por qué le dicen el ‘Kaiser’ en cada jugada que está al límite entre la tarjeta amarilla y roja -de hecho fue el único amonestado en la visita- y con buenos acompañantes como Erick Noriega y Renzo Garcés. Los stoppers no solo son seguros en defensa y saben cubrir bien las espaldas de los carrileros, sino que saben salir jugando, tienen criterio y buen pase para hacerlo.
En el arco Angelo Campos tuvo un par de situaciones en las que tuvo que intervenir y lo hizo con la sobriedad que lo caracteriza.