En los últimos días, el fútbol peruano volvió a vivir un caso extraño en torno al bajísimo rendimiento de un foráneo. Se trató de Mauricio Mazzetti, el argentino que defendió los colores de Juan Aurich por 7 meses y fue despedido por la dirigencia por sus irregulares actuaciones.
Evidentemente, a lo largo de los años, el fútbol peruano vio cómo muchos futbolistas extranjeros pasaron sin dejar huella en el torneo más duro del mundo. Algunos duraron seis meses y otros (con más suerte) un año.
Sin ir muy lejos, Diego Rodríguez llegó a Universitario de Deportes en la gestión de Raúl y Germán Leguía. El uruguayo fue ese refuerzo de Roberto Chale para la Copa Sudamericana, donde quedaron eliminados muy temprano.
De hecho, el uruguayo fue altamente cuestionado por su bajo rendimiento, al igual que Marcos Miers de Alianza Lima, el paraguayo que salió por la puerta falsa de Matute.
Universitario de Deportes: "Pedro Troglio me quería en el equipo", dijo Michael Guevara