“El equipo no se entregó, corrió de atrás todo el partido, no competir te hace perder mucho ritmo, y sin ese ritmo y con una desventaja, el equipo nunca se entregó. Lo que más valoro es el esfuerzo y el sacrificio hasta último momento”, apuntó el técnico en conferencia de prensa.
Garnero insistió que la falta de ritmo tras cuatro meses sin partidos oficiales y la desventaja tempranera apuraron a sus jugadores. "Nos encontramos con esas dificultades, la falta de precisión, muy rápido el rival, con muy poco, también se pone en ventaja”, señaló.
El Decano fue sorprendido por el delantero Isidro Pitta, que en siete minutos hizo dos goles para la algarabía del equipo dirigido por el uruguayo Hernán Rodrigo López.
“En menos de diez minutos ya estaba con dos goles y eso nos apuró, no estamos del todo bien y eso hizo que en el primer tiempo no podamos encontrar en ningún momento el dominio del juego”, añadió.
El argentino refirió que el “segundo fue diferente”. “Si bien no tuvimos jugadas muy claras de gol, el dominio y control fueron nuestro, el rival casi no nos atacó. De haber hecho un gol antes de los 10 minutos, como lo hizo Luque en el primer tiempo, hubiésemos tenido más resto en el final”, sentenció.