En lo que va de la temporada, Santos ha dejado en claro que quiere olvidarse de la problemática del descenso, de los sinsabores que ocasionaron malas administraciones pasadas, sobre todo en el timón del equipo, y que además, su plantilla tiene potencial para pensar en los primeros planos. José Manuel de la Torre ha sabido potencializar sus elementos y robustecerlos. El Chepo, para el Clausura 2017, reforzó la columna vertebral con distintos elementos de experiencia, pero la clave de su presente es que le ha dado las riendas del club a jóvenes de casa.
Para este semestre, Santos Laguna sumó a su causa a futbolistas que pudieran marcar diferencia, ya consolidados en la Liga Mx, como Jonathan Orozco en reemplazo de Agustín Marchesín, Osvaldo Martínez o Julio Furch, para retocar el ataque, pero refrendó también la confianza sobre juveniles surgidos de las fuerzas básicas. El Chepo juega con un esquema 4-3-3, y en cada línea, a excepción del ataque, colocó a un jugador de extracción verdiblanca. Son estos chicos, el equipo ha sobresalido, teniendo equilibrio.
En la zaga, Walter Sandoval sobresale como una especie de lateral por derecha. Arribó a Santos desde el 2012, y desde entonces cumplió con todas las etapas formativas. El torneo pasado, con la llegada del Chepo, su presencia en el once titular se comenzó a dar avisos y para este semestre, ya es una realidad. Con 19 años, es un prospecto interesante para el máximo circuito; ha disputado 539 minutos (99.8% de los posibles) y junto a Izquierdoz y Araujo no se nota su inexperiencia.
Por el otro sector, como lateral por izquierda, Gerardo Arteaga, de 18 años, también sobresale. Las indicaciones del Chepo de la Torre son que llegue a línea de fondo, que pise el área enemiga e intente un disparo lejano. Hasta ahora, ha disputado todos los minutos posibles (540); el inicio de su meta se convirtió en realidad a menos de cuatro años de haber aterrizado en Torreón, para enrolarse en el club, luego de una visoria en Guadalajara.
Es en el medio del campo también hay presencia de la cantera santista. Aquí, con una línea de tres volantes, dos extremos y un contención, los Guerreros muestran sus mejores eslabones. Por derecha, Ulises Rivas es el encargado de explotar la banda. Con 21 años a sus espaldas y la experiencia de más de 10 en la institución, también seleccionado nacional en distintas categorías ha brindado ida y vuelta, y quizás más sacrificio que desdobles, pero para el Chepo es indiscutible.
Del otro lado, como volante izquierdo, Walter Sandoval ha sido revelación en este torneo. Zurdo, de velocidad y dinámica, hasta ahora ha brindado tres asistencias. Tiene 21 años, pero juega como si no fuera este su segundo certamen con mayor continuidad en el máximo circuito. Es el predilecto del Chepo, no hay sustituto que valga para mermar la condición de inamovible. Además de todo, cuenta con potente disparo, que ya intentó, como contra Cruz Azul, en el partido anterior. Por si fuera poco, es el conjunto lagunero el segundo que más canteranos utiliza en la Primera División, solo detrás de Pumas, con seis.
SACRIFICIO COMO ESCUELA
Si algo tienen claro los nuevos eslabones de Santos Laguna es el responder ante la presión. Los cuatro anteriores jóvenes, además de sus cualidades en distintas posiciones, tienen claro que la fórmula para ganarse un puesto en el primer equipo es brindándose al máximo. Este grupo encabeza los primeros cinco puestos de elementos que mayor distancia han recorrido a lo largo del torneo. Ulises Rivas registra 58.3 kilómetros, Gerardo Arteaga 56.3, Sandoval y sus constantes contragolpes 55.1 y Jorge Sánchez 54.9.
En otros rubros, es el propio Sandoval el que vuelve a destacar. En Santos no hay futbolista que haya realizado mayor cantidad de sprints, con 178 esfuerzos en sus primeros 550 minutos disputados; igualmente, es el sublíder de asistencias de la justa, con tres pases que terminaron en gol. Él, junto con sus otros tres compañeros, son el nuevo rostro de la escuadra de Torreón, que puede ilusionarse con un mejor futuro, y no precisamente por los 10 puntos que le ubican en el sexto peldaño de la clasificación, sino, por que su cantera responde.