Durante su carrera como deportista, a Alfonso Victoria le hizo falta lograr un resultado trascendental que le diera un mayor reconocimiento y permitiera que su carrera creciera, sin embargo, ahora en su etapa como entrenador ha ido por otro camino, hasta el punto de convertirse en Jefe de Entrenadores de Selecciones Nacionales.
En su etapa como atleta, la cual duró 10 años, obtuvo dos títulos en Campeonatos Panamericanos (Buenos Aires 2006 y Monterrey 2010), el bronce en la Universiada Mundial en Shenzhen 2011.
Como entrenador ha dirigido al podio internacional a varios taekwondoínes mexicanos, como cuando Rubén Nava logró la plata en los Olímpicos de la Juventud de Nanjing 2014, y las medallas en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015.
Victoria tiene como objetivo que el taekwondo nacional clasifique a más de cuatro atletas a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
¿Cómo te sientes en esta nueva etapa de tu carrera deportiva?
De entrada estoy muy emocionado. Tuve la oportunidad de ser atleta, entrenador de cadetes, juveniles y de adultos, para ver las cosas que se están haciendo bien y cuáles mal. Con esta confianza que me da el presidente de la Federación Mexicana de Taekwondo, Raymundo González, de poder alinear y estabilizar a los equipos nacionales, es muy reconfortante. Uno ha vivido las experiencias desde las etapas estatales hasta ser seleccionado nacional, y he observado las fortalezas y carencias que tiene el equipo mexicano. El cuerpo multidisciplinario tiene las ganas de trabajar y están viendo que la visión del presidente es que ahora México no esté dentro los primeros 10 si no que ocupe los sitios de honor a nivel mundial
¿Sientes que tendrás una responsabilidad muy fuerte tras este nombramiento?
Tenemos una ventaja, que el taekwondo es masivo en México. Hay entrenadores en los estados y en las escuelas, quienes van aportando día a día deportistas a la selección nacional, entonces no estamos como en otros países que nada más tienes cinco o seis atletas, sino que tenemos 200 que vienen atrás con un nivel muy alto gracias a los entrenadores de los estados. A mí lo único que me toca es guiarlos y darles herramientas para que cumplan sus sueños.
¿Sientes que como taekwondoín te faltó ese resultado destacado?
Son etapas. Como atleta me divertía y siempre daba lo máximo, si ganaba o perdía, yo estaba feliz porque sabía que había hecho lo mejor. Ahora en esta nueva etapa como entrenador tenemos una ventaja, que en vez de ganar una medalla como atleta ahora puedo sacar 15 o 20, y más ahora que puede ser en diferentes selecciones y eso te da más alegría. Algunos espacios que te quedan vacíos en tu vida deportiva, ahora se llenan con resultados para México. Aunque no sea mi medalla directamente, me siento como parte de ella tras haber puesto tu granito de arena para que el deportista la consiguiera.
¿Qué carencias y fortalezas ves en el taekwondo mexicano?
Como fortaleza tenemos una gran muestra de atletas, quienes son muy aguerridos y tienen mucha fuerza de voluntad, tienen hambre de triunfar y solo es cuestión de ir puliendo algunos detalles. Como debilidades somos un poco desorganizados en todos los aspectos, falta un orden y una línea de trabajo tanto a nivel administrativo como técnico, y creo que alineando ese tiempo de situaciones tendremos una avance sustancioso en el taekwondo.
¿Por qué Alfonso Victoria es Jefe de Entrenadores?
Primero que nada, tengo convicción y mi objetivo es que seamos el mejor equipo de México que ha existido en todos los tiempos. Soy una persona preparada y que ha estudiado y he vivido el taekwondo. Desde atleta, cuando tenía la cinta blanca y ahora como entrenador, creo que tengo la capacidad de gestionar y analizar cada oportunidad para poder llevarlo a esta visión que tiene el presidente. Tengo una maestría en gestión de entidades deportivas y siempre he dicho que uno no puede saber todo, pero cada uno del equipo multidisciplinario es experto en la materia y trataré de explotar cada una de esas habilidades.
¿Cuál es tu objetivo en este ciclo olímpico ya con este nuevo cargo?
Clasificar a más de cuatro taekwondoínes a los Olímpicos de Tokio 2020, ese es el primer paso. Ya después estaremos hablando de medallas, y más allá de estar pensando en las plazas, que el nivel técnico esté en todos los atletas, que no haya espacios vacíos. Tenemos a una María Espinoza en donde no hay nadie atrás y queremos tener a cuatro o cinco deportistas detrás de ella. En las categorías ligeras, contamos con muchos atletas de calidad, pero en las pesadas no tenemos, por lo tanto debemos enfocarnos más en esos pesos. Hay juveniles que son la base para la mayor, por lo que es justamente ahí donde está la clave para mejorar el taekwondo mexicano”.