Desde mayo pasado, que la directiva de Rodrigo Ares de Parga y el cuerpo técnico de Paco Palencia asumieron en Pumas, la línea que más cambios ha sufrido es el ataque. Conscientes de que requerían refrescar el aparato ofensivo y ante la venta de Ismael Sosa, comenzaron a gestionar, de a poco, modificaciones. Hoy por hoy, y de cara al inicio del Clausura 2017, aquí concentran a canteranos egresados de sus fuerzas básicas y extranjeros de experiencia.
Ahora, la estafeta estelar es para Nicolás Castillo. El delantero centro que arriba a partir de este semestre al Pedregal, lo hace con credenciales suficientes para levantar expectativa en su nueva afición, y con los reflectores encima, debido a un doble campeonato de goleo –más de 30 anotaciones durante el 2016– con Universidad Católica. Portando el '30', será el nuevo referente en el esquema de Palencia (4-2-3-1), y por él, pasarán las mayores oportunidades de triunfo de la oncena auriazul. Su labor no será sencilla.
"Estoy en condiciones para jugar, he entrenado con normalidad. Me he sentido muy a gusto, me han tratado de lo mejor. El tema físico no ha sido problema. Quiero salir campeón con Pumas, pero más que en los objetivos personales, primero pienso en la institución. Lo primordial es aportar lo que más pueda al equipo", dijo en su primera rueda de prensa oficial. Para arroparlo, la dirigencia felina trajo a Bryan Rabello, que en papel partirá como recambio, pero que conoce a la perfección a Castillo.
Ambos coincidieron en las selecciones inferiores de Chile, sobretodo en 2013, cuando los dos vistieron La Roja en el Mundial Sub 20 y el Sudamericano de la misma especialidad. Ahora, el futbol y Pumas los ponen en la misma plantilla, con la esperanza de revivir lo que pueden brindar juntos. Rabello puede desempeñarse como volante por izquierda y/o mediapunta.
Después de casi tres años de su arribo, el hombre de experiencia es Matías Britos, al menos en el ataque. El uruguayo se ha consolidado a lo largo del paso de los torneos como un bastión inamovible en Universidad y sus actuaciones le han otorgado un sitio especial para la afición; si bien iniciará el torneo lejos de la cancha, debido a una lesión, como ya lo ha hecho antes, no sería extraño que volviera y demostrara su capacidad, tanto a nivel de goles, como de sacrificio en pro del colectivo. En cuanto a los elementos de casa, Pablo Barrera es el que lleva la batuta.
El oriundo de Tlalnepantla regresó a su alma mater a mediados del año anterior, y en su primer semestre dio muestra de una mejora considerable; su nombre sonó para integrar la selección nacional y aunque la convocatoria no llegó, terminó el Apertura 2016 con sensaciones positivas, además 17 apariciones con el escuadrón estelar y cinco anotaciones: "Volví porque aquí estoy en mi hábitat, en el lugar donde mejor me siento", dijo.
Y si Barrera Acosta fue una de las sorpresas por su irrupción inesperada, el juvenil Jesús Gallardo lo fue aún más. El volante por izquierda fungió como la mayor apuesta de Palencia en su primer certamen y lo logró al cabo de un par de jornadas, incluso, fue considerado por Juan Carlos Osorio para el máximo representativo nacional. Sumó más de mil minutos y completó dos anotaciones, así como un par de asistencias. Fue revelación y garantía.
Pese a que se incorporó ya iniciado el torneo y de igual forma vio acción hasta casi culminar la fase regular, Santiago Palacios se confirmó como una opción importante en el frente de ataque. El surgido en La Cantera, de 25 años y experiencia previa en distintas divisiones de Holanda, fue fundamental para conseguir el pase a la Liguilla, luego de sumar asistencias y goles, sobre todo ante Veracruz y Morelia, respectivamente.
Una de las nuevas propuestas para el primer equipo es Omar Islas, que ahora sí, contrario hace un par de años, cuando debutó, tendrá oportunidad de demostrar su calidad ante la baja de varios indispensables como Eduardo Herrera, Fidel Martínez y Saúl Berjón. Omar, que tuviera minutos con Memo Vázquez en el timón, a inicios del 2015, tuvo que esperar dos años para que la posibilidad volviera a él.