Jugar en el América es algo que muchos futbolistas nacionales y extranjeros desean, saben que llegar a las Águilas es alcanzar la élite del futbol mexicano y también del continente, porque el nombre de la institución azulcrema es reconocido desde el primer rincón de Canadá hasta el último resquicio de Sudamérica.
Muchos llegan y pocos triunfan. Muchos llegan y muchos quedan a deber, porque no están a la altura de lo que demanda la institución la cual exige un carácter especial para triunfar en América; además de condiciones futbolísticas se debe tener un toque de personalidad y valentía.
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Cientos de jugadores han pasado por la historia de las Águilas, pero solo algunos han logrado la etiqueta de ídolos, porque han dejado su impronta en el campo, han conectado con la tribuna y en algunos casos han ganado títulos. Sus historias son contadas de generación en generación.
En el entorno de América hoy aún se habla de las atajadas de Héctor Miguel Zelada, del juego exquisito de Carlos Reinoso, de los goles de Enrique Borja, del temperamento de Cuauhtémoc Blanco, del dribling de Daniel Brailovsky, de la fuerza y personalidad que imponían en la defensa Alfredo Tena y Cristóbal Ortega, del manejo de los tiempos de Álvaro Fidalgo y hasta el mismo Henry Martín quien ya es uno de los históricos goleadores.
Han marcado su historia
Estos son algunos de los jugadores que han pasado por Coapa y que dejaron su huella, algunos son personajes sin los que simplemente sin ellos no se podría entender el presente.
Rafael Garza Gutiérrez Récord
La historia del Club América no podía escribirse sin mencionar a este personaje, fue uno de los fundadores del equipo. Nació el 13 de diciembre de 1896, estudió en el Colegio Mascarones. Inició su carrera jugando como mediocampista, aunque después se convirtió en defensa central. Fue pieza clave para que el América lograra sus primeros títulos en la época amateur. Incluso en los primeros años fue capitán del equipo y entrenador a la vez.
Durante su carrera solo los colores del América, con el que obtuvo cuatro títulos de Liga. Después de retirarse como futbolista en 1932 se convirtió en entrenador, dirigió al América y a la Selección Nacional por varios años. Falleció en 1974, pero su huella es eterna por haberle dado vida al club.
Gracias al sueño americanista de Rafael Garza Gutiérrez "Récord"???? podemos celebrar 104 años de eterna grandeza.
— Club América (@ClubAmerica) October 13, 2020
¡Gracias eternas!#104MÉRICA #SiempreÁguilas ???? pic.twitter.com/V3dDh01ItZ
Octavio La Pulga Vial
Delantero de origen mexicano que nació el 26 de diciembre de 1919, pese a no ser muy alto, destacó por su habilidad para escurrirse de los defensas rivales con y sin la pelota, fue una figura del ataque americanista en la época amateur.
El 24 de julio de 1938, Vial junto a Enrique Ostos y Armando Frank, fueron fundamentales para que América se convirtiera por primera vez en Campeón de Copa, luego de vencer 3-1 al España. En la temporada 1940-41 La Pulga fue el máximo goleador del torneo con 15 anotaciones. De hecho, fue el único jugador de América que logró esta distinción en la época amateur del club.
José Alves Zague
Fue un delantero que nació el 10 de agosto de 1934 en Brasil. A los 18 años el Botafogo lo incorporó a sus filas, pero sus condiciones lo llevaron nada menos que al Santos, sí el mismo club en el que brillaba Pelé.
Su desempeño llamó la atención del América y llegó a México para debutar con el cuadro azulcrema el 19 de noviembre de 1961. Los seguidores del América lo bautizaron como El Lobo Solitario, porque era un futbolista que tenía la agilidad para irse de sus marcadores, con una buena conducción y mucha velocidad.
Sus goles fueron claves para la conquista de dos títulos de Copa, en las Temporadas 1962-63 y 1963-64. Y en la Temporada 1965-66 contribuyó con 20 goles para la obtención del título de Liga, además de que en esa misma campaña se levantó como campeón de goleo. Es el extranjero con más goles en la historia de las Águilas con 109 anotaciones.
Carlos El Maestro Reinoso
Cuando se escucha el nombre de Carlos Reinoso el americanismo hace una pausa. Mediocampista de origen chileno que llegó al América en 1970 y como jugador permaneció en el club ocho años.
Aunque no era centro delantero, con la camiseta americanista anotó 96 goles y logró dos títulos de Liga en las temporadas 1970-71 y 1975-76, campeón de Copa México en la temporada 1973-74, Campeón de Campeones en 1975-76 y la Copa Concacaf en 1978; además, con un gol suyo de tiro libre, América venció a Boca Juniors en la Copa Interamericana de 1978.
Después de ser jugador, también dirigió a las Águilas a las que llevó a lograr el título de Liga de la temporada 1983-84, nada menos que ante Chivas, en la única Final de Liga que han disputado ambos equipos.
Enrique El Cyrano Borja
Delantero mexicano que nació en Pumas, pero América lo compró y en las Águilas brilló. Borja debutó 12 de Julio de 1969, en un Clásico contra Chivas en el Estadio Jalisco. Su primer gol con el América se lo hizo al Toluca en el Estadio Azteca el 28 de Agosto de 1969 en la jornada 13.
Fue tanta la identificación que logró Borja con el aficionado americanista, que éste coreaba su apellido en los partidos del equipo en el estadio Azteca. “Borja, Borja, Borja”, se escuchaba por aquellos años en las tribunas del Coloso de Santa Úrsula.
Con el América fue tres veces consecutivas campeón de goleo. En la Temporada 1970-71 con 20 goles, en la 1971-72 con 26 goles y en la 1972-73 con 24 goles. Su mejor época en el club fue cuando al frente del equipo estaba el entrenador José Antonio Roca.
Su despedida del América como del futbol profesional fue algo para el recuerdo, aquel 18 de septiembre de 1977, en la jornada 8 del torneo de liga 1977-78, América se enfrentó a los Pumas, Enrique nunca le había anotado un gol a los Universitarios, pero el destino quiso que ese día les marcara dos. Ese día concluyó la carrera de uno de los ídolos del futbol mexicano y del América.
Héctor Miguel Zelada
Portero argentino que llegó como refuerzo de América para la temporada 1978-79, procedente del equipo Rosario Central. Zelada tenía por delante a dos porteros de renombre como Francisco Castrejón y Pedro Soto. El portero argentino llegó a mitad de temporada y Raúl Cárdenas lo hizo debutar en un Clásico contra Chivas el 4 de marzo de 1979, en el Estadio Jalisco.
Con el paso del tiempo, Zelada fue ganando en confianza y logró ser campeón con América por tres temporadas consecutivas, en la mejor época de las Águilas en la Primera División: la década de los ochenta.
Fue en la temporada 1983-84, cuando tuvo su mejor momento como americanista. En la Final de esa temporada contra Chivas en el juego de vuelta en el Estadio Azteca le detuvo un penal a Eduardo Cisneros, una imagen que los aficionados guardan en su memoria. El último torneo que jugó con América fue el de la temporada 1986-87. Y aún en estos tiempos los seguidores azulcremas lo califican como el mejor arquero en la historia del equipo.
Alfredo Tena (El Capitán Furia)
Cuando los aficionados del América hablan de Alfredo Tena lo hacen con gran respeto, porque es uno de los referentes del equipo, criado en la cantera americanista fue figura en la década de los años 80.
Alfredo Tena Garduño nació el 21 de noviembre de 1956 en la Ciudad de México, fue un defensa central que llamó la atención del entonces entrenador José Antonio Roca por las condiciones que tenía para jugar al futbol y había mostrado sus condiciones en el torneo nacional de reservas.
Durante 18 años Alfredo Tena defendió la camiseta del América, y siempre lo hizo con orgullo y sentido de pertenencia, es (junto con Cristóbal Ortega) los más ganadores en la historia de las Águilas. Se retiró en 1991, por una lesión, pero fue entrenador del primer equipo y estuvo a cargo de las fuerzas básicas, siendo un referente del americanismo del que todos escuchaban y le aprendían.
Cristóbal Ortega
Si con Alfredo Tena se habla de un icono de América, con Cristóbal Ortega ocurre lo mismo. Futbolista de una sola camiseta, se entregó en cuerpo y alma a la defensa de la playera de las Águilas. Nació en la Ciudad de México el 25 de julio de 1956 y cuando apenas tenía 16 años llegó al club y empezó a formarse desde abajo hasta poder alcanzar el sueño de debutar en el equipo profesional, algo que logró en el torneo de Copa en la temporada 1974-75, jugando como extremo, pero después retrasó su posición el medio campo.
Con la camisa de América fue campeón de Liga en las temporadas 1975-76, 1983-84, 1984-85, el torneo Prode 1985, el 1987-88 y 1988-89. También fue Campeón de Campeones en 1975-76, 1987-88 y 1988-89. Además de campeón de la Concacaf en 1978, 1987, 1991 y Campeón de la Copa Interamericana en 1978 y 1991.
Happy Birthday, Cristóbal Ortega! ???????? pic.twitter.com/X8dDBaT1Bp
— Club América EN (@ClubAmerica_EN) July 25, 2023
En la temporada 1991-92, luego de lesionarse de la que no pudo recuperarse a plenitud, el entonces entrenador Paulo Roberto Falcao (de origen brasileño), no lo consideró más, por lo que Cristóbal decidió retirarse. Su último partido que jugó fue el 15 de diciembre de 1991, correspondiente a la jornada 16 de la temporada 1991-92 en el estadio Corona contra Santos.
Daniel El Ruso Brailovsky
Delantero de origen argentino que llegó al América en la época que las Águilas eran dirigidas por Carlos Reinoso. No tardó en asimilar la ideología del América y de inmediato conectó con la afición por su desequilibrio.
En cuanto Brailovsky se hizo con la titularidad fue un jugador que se convirtió en pieza clave de las Águilas a nivel ofensivo. Ganó dos títulos con América, en las temporadas 1983-84 y 1984-85 y se perfilaba para alcanzar el tricampeonato en el Prode 1985, pero se marchó del país justo después de los terremotos de 1985.
Una de las noches más memorables que Brailovsky vivió con América fue la de la Final de la Temporada 1984-85, cuando las Águilas se impusieron a los Pumas en esa serie que se definió con un tercer partido en el estadio La Corregidora de Querétaro.
Luis Roberto Alves Zaguinho
Luis Roberto Alves dos Santos, mejor conocido como Zaguinho, nació el 23 de abril de 1967 en la Ciudad de México, es hijo del brasileño José Roberto Alves Zague, quien fue un jugador histórico del América.
Su primer partido como jugador de América se dio el 1 de noviembre de 1985, contra la U.de G. Zaguinho destacaba por su velocidad y capacidad de definición con la pierna izquierda. Su primer gol fue contra el Puebla, en el Estadio Cuauhtémoc el 22 de diciembre de 1985. Ostenta el récord de más goles anotados en un partido, cuando le marcó siete goles a Martinica en la Copa Oro de 1993.
Zaguinho tuvo dos etapas en América, la primera de 1985 a 1996 y la segunda de 1997 a 1998. Por si fuera poco, es, hasta la fecha, el máximo anotador en la historia del América con 162 goles. Y allá por donde va, siempre defiende su americanismo.
Cuauhtémoc Blanco
Un caudillo de la época moderna, delantero de origen mexicano nacido en la capital del país el 17 de enero de 1973. “El Temo” llegó a Coapa en 1990 y empezó a llamar la atención de los entrenadores que destacaban su calidad en el campo.
Fue Miguel Ángel El Zurdo López quien le dio la posibilidad de debutar en la Primera División, algo que ocurrió en la temporada 1992-93, en un partido contra el León correspondiente a la jornada 18. Sus condiciones le fueron abriendo paso en el primer equipo donde empezó a consolidarse, gracias a la confianza que le tuvo el técnico holandés Leo Beenhakker.
Fue y vino del club y por fin alcanzó la gloria en el Clausura 2005, levantando el trofeo de campeón de liga, el sueño más grande que había tenido. Se retiró de las Águilas en una especie de homenaje, aunque tuvo sus desencuentros con directivos siempre ha mantenido su americanismo por encima de todo.
Moisés Muñoz
Portero mexicano que fue protagonista de una época próspera en las Águilas, sobre todo se le recuerda por el gol que marcó en la Final del Clausura 2013, cuando en la última acción del duelo de vuelta se lanzó como kamikaze para marcar el gol que le dio al América el empate en el global, y con eso mandó el juego a tiempo extra.
Esa acción de Moisés marcó su carrera y al americanismo, porque si le hacía falta un título dramático lo obtuvo en ese momento. Logró también el título del Apertura 2014 y dos títulos Concacaf, por lo que ha sido uno de los ídolos de la época moderna.
Edson Álvarez
Mediocampista mexicano que irrumpió en la Primera División de la mano de Ricardo La Volpe, es uno de esos talentos que se pulen en las fuerzas básicas del América y que llevan el club en la sangre. Estuvo a nada de ser el héroe del Centenario, cuando el equipo perdió en penales la Final del Apertura 2016 ante Tigres.
Sin embargo, en el Apertura 2018 fue pieza clave en la Final contra Cruz Azul en la que marcó dos goles para darle el título al conjunto azulcrema.
Sus condiciones lo llevaron a Selección Mexicana, también al Ajax de Países Bajos y ahora se curte en la élite de la Premier League. Uno de los últimos diamantes que nació en Coapa.
Henry Martín
El actual capitán de las Águilas llegó al América para triunfar y se ha convertido en uno de los goleadores históricos del club. Mostró su temperamento y personalidad cuando no se amilanó para pelear por un puesto ante jugadores extranjeros, ganó el pulso y empezó a construir una historia de puro éxito, ya es uno de los máximos anotadores del club y ha ganado tres títulos de liga, y otros tantos más, además de un título de goleo individual.
Henry se ha ganado un lugar especial en la historia del América, seleccionado nacional y líder del vestuario, el atacante yucateco apunta a seguir cosechando más éxitos con la playera azulcrema, entre goles y títulos puede alcanzar una gran cosecha como azulcrema.
Álvaro Fidalgo
Mediocampista de origen español que apenas tiene un par de años defendiendo la playera azulcrema; sin embargo, desde que llegó tuvo una conexión especial tanto con la afición como con la institución, porque se trata de un futbolista con un juego exquisito.
El Maguito se ha convertido en el jugador que maneja los hilos del mediocampo, desde la recuperación y la construcción de las jugadas de peligro aterrizó en la época de Santiago Solari, pero su explosión llegó con André Jardine. Después de que el título se le negó resistió los ofrecimientos de algunos clubes europeos y se mantuvo comprometido con la causa, obtuvo su recompensa porque fue pieza clave para la obtención del bicampeonato y de los títulos posteriores; Álvaro se ha convertido en un referente del conjunto azulcrema y aunque su futuro luce a un incierto, porque ha llamado el interés de algunos clubes europeos, el día que se marche dejará una gran huella en el corazón de los americanistas.
ZZM