El delantero de las Chivas, Santiago Ormeño salió muy cariñoso del Clásico Tapatío, pues se despidió de Anderson Santamaría, defensa del Atlas, con tremendo apretón de nalga.
Ni el haber fallado la última chance de gol en tiempo de compensación dejó triste a Ormeño, quien aprovechó al final para saludar a Santamaría, su compañero en la Selección de Perú.
Fue tras el silbatazo final cuando Santamaría se acercó a saludarlo. Hubo un fuerte abrazo, platicaron y llegó el agarrón de Ormeño.
Ormeño disputó su primer Clásico Tapatío y tuvo dos chances de anotar. La primera voló su remate y al final no pudo en un mano a mano frente a Camilo Vargas para dejar el 1-1 final.
Julián Quiñones hizo el 1-0 para los Zorros y a 7 minutos del final empató, Carlos Cisneros.