El Morelia, transformado en el Mazatlán FC, y los Tigres UANL, fueron los equipos del fútbol mexicano que más daño causaron por las prácticas monopólicas, según la Comisión Federal de Competencia Económica COFECE) que los multó con 8.6 millones de dólares.
Según la resolución del caso consultada este sábado por Efe, el Morelia provocó un daño por el "derecho de retención", conocido como "pacto de caballeros", de 348.534 dólares, la mayor cifra entre los 17 conjuntos sancionados.
La autoridad tomó como referencia para calcular el daño la reducción de 6.454 dólares que cada uno de los 54 futbolistas retenidos por el Morelia percibió menos en su salario por esta práctica.
La COFECE aseguró que con el pacto de caballeros, los actores del fútbol mexicano atentaron contra el derecho humano de libertad de profesión ya que afectaron la movilidad de jugadores sin contrato, quienes no podían fichar por otro conjunto hasta que se pusieran de acuerdo con su último equipo, que debía recibir alguna contraprestación.
El Morelia, que en 2020 se cambió el nombre a Mazatlán FC, es propiedad del empresario Ricardo Salinas Pliego, el tercer mexicano con más dinero de acuerdo con el listado de la Revista Forbes.
La autoridad aseguró que el Morelia participó en la práctica de retención desde su implementación, el 29 de junio de 2008, hasta el final, el 10 de diciembre de 2018.
El equipo del magnate mexicano también fue el que recibió la multa más alta entre todos los equipos, de 662.215 dólares.
Otros cuadros que más castigaron a los jugadores fueron el Tijuana, con 47 afectados, el Toluca, con 46, y el Puebla y el Atlas, con 32 cada uno.
En total, los 17 equipos sancionados generaron un daño de 2.5 millones de dólares, el mismo que la COFECE le atribuye a la Federación Mexicana de Fútbol, multada con 110.352 dólares por ayudar y ser cómplice de su implementación.
El regulador de competencia identificó a Enrique Bonilla, expresidente de la Liga Mx, como el autor intelectual de la sistematización el derecho de retención, por lo que fue multado con 84.866 dólares.
"El derecho de retención fue un mecanismo de compensación temporal de los Clubes que buscó contribuir para dotarlos de una estabilidad financiera sustentable a efecto de incentivar las inversiones. Asimismo, generó un incremento en las percepciones recibidas por los jugadores", justificó Bonilla la práctica.
Los Tigres, financiados por la cementera Cemex, fueron el equipo que más afectó en la otra práctica monopólica detectada por la COFECE, un tope salarial a las jugadores de la Liga femenina.
En la primera temporada, la 2017-2018, las futbolistas mayores de 23 años podían ganar como máximo 97 dólares al mes y las menores, 24. En cuanto a las sub'17, no tendrían ingresos y sólo apoyos como comida y transporte.
En la 2018-2019, el tope subió a 733.464 dólares al mes y las gratificaciones en especie no podían superar los 2.444 dólares.
Los funcionarios calcularon que esto redujo las ganancias de las jugadoras en 1.366 dólares en el primer torneo, el Apertura 2017; en el siguiente, el Clausura 2018, 1.289; en el Apertura 2018, de 487, y en el Clausura 2019, de 493.
Tigres, máximo ganador de la Liga de mujeres con cuatro títulos, hizo un daño de 122.701 dólares, por lo que sufrió una multa de 233.133 dólares, la más alta entre los conjuntos.
La FMF causó afectaciones por 1.5 millones de dólares y la COFECE también puso a Enrique Bonilla como el planificador de la medida que "profundizó la brecha salarial por razón de género".
"(El tope salarial fue) con la finalidad de que los clubes pudieran invertir en el desarrollo y establecimiento de la Liga Mx Femenil como un producto y marca en México", defendió el tope salarial Bonilla, multado por su participación con 84.866 dólares.
Además de los Tigres, los otros clubes que más afectaron a las futbolistas fueron el Pachuca, con un daño de 115.940 dólares; el Toluca, 114.994; Tijuana, 111.971; y el Atlas, 107.329.