JALISCO -- El guardameta tapatío, Raúl Gudiño, quien pertenece al Porto pero que en el último año futbolístico jugó para el Apoel Nicosia de Chipre, no descarta la posibilidad de regresar a México para defender los colores de Chivas, club que lo forjó y del cual se fue vendido al club portugués.
Hoy, a cuatro años de distancia de su fichaje con el Porto, ha disputado mundiales en selecciones menores, tenido roce internacional con sus clubes e incluso apariciones en Champions League, pero el guardameta acepta tener una 'espinita' clavada, pues pese lo anterior no consiguió debutar con el Rebaño en la Liga MX.
El primer arquero mexicano en ganar una liga en el fútbol europeo recibió en su hogar a ESPN Digital, donde confesó que no le desagradaría volver a la cuna que lo vio nacer futbolísticamente.
“Yo no me cierro las puertas a ninguna liga o ningún equipo. Nunca debuté aquí en México y tengo esa 'espinita'. No me cierro la puerta, sea donde sea; lo que me mueve y me motiva es jugar, sé de los rumores pero lo dejo todo en manos de la gente que me representa”,apuntó.
-¿El sueño sigue siendo de quedarse en Europa?
“Yo soy un profesional en todos los sentidos y se que la decisión que tomen será la mejor. Siempre voy a estar puesto para jugar”.
-¿Sería un fracaso regresar a México?
“Nunca sería un fracaso regresar porque uno busca siempre lo mejor para su carrera. Si en su momento hay que regresar, se toma con la mayor madurez y responsabilidad, no es un paso para atrás, sino que se busca la manera de mejorar”.
-¿Cómo fue para ustedes la obtención del título con el Apoel?
“Fue muy sufrido, fue algo que fuimos trabajando, sabíamos que estaba en nuestras manos y cuando por fin logramos el título, nos quitamos mucho peso de encima con toda la presión. En cada año que termino, he logrado dar un paso adelante en mi carrera en cuanto a metas y sueños; fue un muy buen año, pero esperemos que vengan más como este o mucho mejores”.
-¿Es difícil tomar la decisión de dejar tu hogar en la búsqueda del sueño en el fútbol europeo?
“Esas decisiones que son tan difíciles en la carrera y en la vida de uno, cuando las ves cómo otros jugadores como Guardado u Ochoa buscan su futuro te hace tomarlos como ejemplo. Eso demuestra que ellos, al igual que yo, disfrutan de jugar al fútbol y quieren estar en un nivel tan grande que buscan la manera de mejorar.
“Cuando yo tomé la decisión de ir a Europa, lo hice sin miedo a nada, a enfrentar otro país diferente y otra cultura e irme lejos de mi familia, pero la decisión la tomé sin miedo ni temor de lo que viniera y siempre buscando mi sueño”, finalizó.