Los pronósticos decían que los Patriotas eran favoritos para ganar. Y Tom Brady y compañía fueron mucho para los Raiders y cumplieron con lo que se esperaba. Los visitantes mostraron que están a años luz de los de Negro y Plata e hicieron suya la fiesta de la NFL en México, en la que se incluyó la patada de gol de campo más larga en la historia de los Pats: un intento de 62 yardas.
Raiders fue el local y quería ser el protagonista de la fiesta, al fin y al cabo era el anfitrión, pero Patriotas fue notablemente superior desde el arranque y así no hubo nada qué festejar para los Raiders, que regresan a casa con su sexta derrota del año.
Por su parte, Tom Brady se convirtió en la estrella del día, era el jugador que más querían ver los aficionados (tanto de los Patriotas como de otros equipos) y no les falló. El QB acabó con 339 yardas, tres pases de anotación, en una tarde en la que su ofensiva tuvo un día de campo con 338 yardas totales. Patriotas tuvo ocho series ofensivas y sumó puntos en siete de ellas.
Además de eso, el pateador Stephen Gostkowski tuvo una de sus mejores tardes al hacer buenos cuatro goles de campo, incluyendo una patada de 62 yardas antes del medio tiempo.
Con este resultado, los Patriotas vuelven a casa como él mejor equipo de la AFC presumiendo un récord de 8-2, y se prepararán para enfrentar a los Delfines de Miami, mientras Raiders recibirá a los Broncos de Denver.
Un mal anfitrión
Los errores y la mala ejecución mataron a los Raiders desde el primer cuarto. Un pase incompleto que le pegó en la mando al receptor en tercera oportunidad, un pase interceptado, un castigo de 10 yardas y un fumble fue como los de Negro y Plata acabaron con sus oportunidades de pelearle a los Patriotas. Y éste equipo no perdonó y demostró cómo se debe de ejecutar en la Semana 11 de una temporada.
Con la primera serie ofensiva se mostró la diferencia entre los dos conjuntos. Raiders realizó seis jugadas y su ofensiva se detuvo cuando Seth Roberts no atrapó el pase que le pegó en las manos. Vino Patriotas y armó un ataque agresivo, con jugadas en serie, que en 7:07 minutos llegó a la zona de anotación. Con 15 jugadas Nueva Inglaterra ya tenía la ventaja. El pase de touchdown fue a Dion Lewis.
La tendencia no cambió para los Raiders, cuya ofensiva tuvo dos series que fueron detenidas por malas ejecuciones, primero con un pase largo que terminó en manos del rival y luego un castigo de 10 yardas en territorio rival los detuvo.
Y los Pats les hicieron pagar cuando volvieron a tener el balón. En la primera jugada se fueron a la yugular con un pase de 52 yardas que los llevó a la yarda 28. Ocho jugadas después llegó el pase a Danny Amendola para colocar el 14-0.
Para cerrar la primera mitad la tendencia no cambió y Oakland se volvió a disparar en el pie cuando amenazaba seriamente. Derek Carr completó con Seth Roberts pero el receptor perdió el ovoide y Nueva Inglaterra se quedó con el balón con 33 segundos por jugar. Parecía el final del duelo sino es porque Brady estaba en el campo.
El mariscal de campo movió a su ataque 49 yardas para dejar el balón en la 45 del rival y desde ahí intentaron un gol de campo de 62 yardas. Y en la Ciudad de México no es tan difícil hacerlo y Stephen Gostkowski lo concretó con facilidad para irse al descanso 17-0.
Para la segunda mitad el mensaje fue claro. Patriotas recibió el balón y en tres jugadas sentenció el duelo. Tom Brady envió pase de 64 yardas a Brandon Cooks para poner el aplastante 24-0.
Siguiente ofensiva, Patriotas se mete al terreno rival y saca otros tres puntos, ahora con un gol de campo de 51 yardas de Gostkowski.
Raiders se quitó la blanqueada con un pase de anotación de 9 yardas a Amari Cooper, con 11:43 por jugar en el último cuarto.
El último ataque de los Pats que terminó con puntos fue tras una ofensiva en el último cuarto que concluyó con el cuarto gol de campo de Gostkowski.