27 jugadores ha comprado Jorge Vergara después del Apertura2006, año en el que el Guadalajara salió campeón por última ocasión. La inversión ha sido fuerte, aproximadamente unos 120.5 millones de dólares en estos elementos que, en su mayoría, de poco le sirvieron al conjunto rojiblanco. Claro que, hay otros futbolistas que también arribaron, pero fueron vía préstamo o simplemente como moneda de cambio, por los cuales no se pegaron cantidades fuertes.
Luego de que Chivas derrotó a Toluca en el Apertura 2006, se creía que el equipo comenzaría una época importante, tal como lo había dicho su dueño cuando compró al conjunto. Sin embargo, los fichajes que se hicieron no fueron de lo mejor.
Por aquellos días, la directiva se enfocó en elementos ya hechos en el futbol mexicano, incluso con mucho recorrido, varios de ellos con una etiqueta importante.
Omar Arellano duró mucho tiempo en el conjunto rojiblanco, y aunque tuvo torneos interesantes, no logró ser el atacante histórico que se buscaba. Carlos Ochoa arribó para el Apertura 2009, aunque sus problemas extra cancha fueron más sonados que su buen futbol.
Uno de los gastos más improductivos para los rojiblancos fue la contratación de Aarón Galindo en el Clausura 2009. El mismo Vergara reconoció en varias ocasiones que le metió muchos millones de dólares (5 mdd) a esa compra, y que al final no le funcionó. Tan es así que luego de un año se fue del equipo.
Uno de los que pasaron sin pena ni gloria fue Jared Borgetti. El goleador histórico mexicano, el seleccionado nacional, no logró aportar a la causa tapatía. Solo estuvo el Clausura 2009, y no logró anotar.
Algo similar pasó con Aldo de Nigris, pero éste sí tuvo mayor oportunidad. Entre otros goleadores que tampoco consiguió ser ese matón de área que los llevará a un campeonato están Miguel Sabah ni Rafael Márquez Lugo. El primero siempre levantó la mano, cumplió. El segundo se vio mermado por sus constantes lesiones, al grado que lo hicieron retirarse.
Carlos Peña fue la joya que siempre ambicionó Jorge Vergara, fueron por él en el Apertura 2016. El Gullit terminó por decepcionar, convirtió goles importantes incluso en clásicos, pero la afición nunca le perdonó el penal que voló en la vuelta de los cuartos de final del Clausura 2016 ante el América. Su segundo torneo derivó en una debacle que lo regresó al amor de su vida, el León, aunque solo a préstamo, ya que sigue perteneciendo al equipo tapatío.
El polo opuesto a estos elementos son las compras más recientes. Aunque Rodolfo Pizarro se la pasó lesionado un tercio del presente torneo, cuando logró volver al campo fue fundamental en el esquema del entrenador Matías Almeyda, su actuación entrando de cambio ante Atlas así como en los duelos ante Toluca, no dejó duda de que es un inamovible del cuadro Tapatío; incluso, fue autor de uno de los dos goles que metieron al equipo a esta Final.
Orbelín Pineda, llegó a Chivas en el Clausura 2016 procedente de Querétaro y de inmediato se adueñó del medio campo rojiblanco, el volante de la tierra caliente de Guerrero, se consolidó como un mediocampista con fuelle y dinámica. Además de haber marcado cuatro goles en su estadía con el Rebaño, ha sido fundamental en el presente torneo formando un medio campo sólido con José Juan Vázquez, sumando mil 652 minutos en el presente certamen participando en todos los encuentros de fase regular y liguilla.
Por cierto, el Gallito Vázquez, quien llegó en el Apertura 2016, solo vio participación en diez encuentros entre fase regular y liguilla, siendo Michel Pérez quien lo mandó al banquillo de suplentes. Sin embargo, en este certamen se apoderó de la contención, y ha disputado 19 encuentros entre torneo regular y fase final. Retomó su nivel y aunque titubeó en el gol del empate de Toluca en la vuelta el pasado domingo, su sacrificio y recorrido de cancha lo convierten en un eje medular de la columna vertebral de Chivas.
Alan Pulido vive su segundo torneo con Chivas, el Tamaulipeco registró 5 anotaciones, cifra que parece engañosa ya que ha mostrado el sacrificio que se requiere para encarar la fase final. Se desprende y proyecta balones hacia las bandas; además, es importante a la hora de retener la pelota y buscar faltas que desesperen a las defensas rivales. En la final, Alan demostró su valor.