La eliminación pegó fuerte en el Sevilla. Nadie imaginó que el equipo de Jorge Sampaoli quedaría en el camino en octavos de final de la Champions League ante el Leicester, más por lo que había mostrado en el partido de ida, donde lo pasó por arriba a su rival.
El equipo inglés, luego de ese partido en Nervión, destituyó a Claudio Ranieri y comenzó la remontada. Además, el conjunto español erró dos penales en la serie, ambos atajados por Peter Schmeichel. Y en el partido de vuelta, una infantil reacción de Samir Nasri también acabó con las ilusiones de los andaluces.
A falta de 15', cuando el Sevilla sí o sí necesitaba un gol, Jamie Vardy, el gran delantero de 'The Foxes', provocó a Samir, a lo que el francés reaccionó y dejó a su equipo con uno menos.
" (Vardy) me empujó y me dijo: ¿Qué estás haciendo?. Entonces me acerqué y nos encaramos. Después, él se fue al suelo. Pensaba que los futbolistas ingleses eran más duros. Para mí es un tramposo. Si fuera un jugador extranjero, la prensa inglesa hubiera dicho que es un tramposo. No es un hombre", expresó, indignado el mediocampista galo.
Además, en declaraciones que recogen medios ingleses, el ex Manchester City mencionó: "Me hubiera gustado hablar con él, pero ya sabes. Hay muchas cámaras, mucha seguridad, y tengo que pensar en la temporada que viene y no recibir una gran sanción; no te gustaría escribir lo que le hubiera dicho a Vardy".
Por su parte, el delantero de la selección de Inglaterra, en diálogo con BBC, negó la acusación: "No soy un tramposo ni lo he sido nunca. Es todo lo que tengo que decir al respecto".