Después de 2 temporadas en el Castilla, tras haber disputado solamente 1 encuentro en esta temporada con el primer equipo, Martin Odegaard ponía en enero rumbo a Holanda. Al cumplir la mayoría de edad salió cedido para enrolarse en las filas del Heerenveen, donde ya suma 8 encuentros.
Aunque las cosas no le han salido a su equipo como esperaba, ya que de esos partidos 5 son derrotas, por 2 victorias y 1 empate. No está teniendo tampoco suerte a nivel personal el noruego, que pese a las elevadas expectativas que había sobre él no está terminando de convencer.
Eso sí, como explica El Confidencial, seguirá teniendo minutos porque de ello se aseguraron en el conjunto merengue al ponerle una cláusula especial a su contrato. Nada menos que 40.000 € de penalización al equipo neerlandés por cada partido que el joven talento nórdico no dispute.
Todo ello en una cesión que está firmada hasta junio de 2018 pero que desde la capital de España pueden interrumpir en cualquier momento. Con esa cláusula el Real Madrid quiere cerciorarse de que va adquiriendo experiencia, que por otro lado es lo que necesita para desarrollar todo su potencial.