El mercado estival en la Serie A estará muy activo tanto a nivel de plantillas como en los banquillos ya que, tal y como apunta Corriere dello Sport, varios entrenadores tienen muchas papeletas para marcharse a final de temporada. Incluso la Juventus de Turín, que se postula como campeón otro año más, podría cambiar de técnico.
El futuro de Massimiliano Allegri está en el aire ante el interés del Arsenal en hacerse con sus servicios. Además, en la directiva de la Vecchia Signora quieren darle un impulso al proyecto con un entrenador de diferentes características como Leonardo Jardim y Paulo Sosa, por lo que solo una gran actuación en la Champions League podría mantenerle en el puesto.
La AS Roma tampoco tiene claro su futuro ya que Luciano Spalletti ha condicionado su futuro al proyecto deportivo que le ofrezca la directiva ya que el italiano quiere ganar y no resignarse a un segundo plano en Italia. Además, su contrato acaba en junio de 2017 y no hay noticias sobre su renovación.
Para muchos el Nápoles es el equipo que mejor juega en Italia gracias a Maurizio Sarri, pero aun así este no tiene garantizado su futuro. Tras las declaraciones del presidente del club, Aurelio De Laurentiis, en las que ponía en entredicho las decisiones del técnico, la relación entre ambos se ha enturbiado aún más y esto podría hacer que el napolitano se marchase del club a final de temporada.
El Inter de Milán vive un gran momento en la Serie A gracias a Stefano Pioli. El técnico ha conseguido dotar al equipo de solidez e ideas claras y tras un complicado inicio de temporada han conseguido asentarse en las posiciones que dan acceso a Europa la temporada que viene. Por esto, el único que podría arrebatarle su puesto sería Diego Pablo Simeone, pero se espera que el argentino continúe un año más al frente del Atlético de Madrid. Por lo que su llegada al conjunto neroazurro tendrá que esperar.
El otro grande de Italia venido a menos parece que ha encontrado estabilidad y, sobre todo, un estilo de juego con Vincenzo Montella al mando pero la participación para Europa la próxima campaña es una obligación y, de momento, se encuentran fuera de estos puestos. Por lo que los directivos del AC Milan están pendientes del futuro de Eusebio di Francesco si no se consigue el objetivo.