Ahora que estamos inmersos en el tema de la renovación de Lionel Messi con el FC Barcelona, gran prioridad del club para este año, hemos querido recordar cómo han sido las salidas de las últimas figuras del cuadro culé. Y no hay precisamente buenos recuerdos de esas marchas en Can Barça, si tiramos de hemeroteca.
Salidas en el cuadro culé ha habido muchas en estos años, y de diferente índole. Pero nos centramos en la estrella de cada momento, en esa figura que marcaba las diferencias y era el principal referente. Aunque con Messi también han coincidido jugadores de la talla de Samuel Eto’o o Zlatan Ibrahimovic que no salieron muy bien, en este caso por deseo de Pep Guardiola.
Pero entonces el argentino ya era la gran figura. Y tomó el relevo en 2008 de Ronaldinho, a quien precisamente Guardiola no quiso cuando llegó ese año al banquillo. El brasileño llevaba ya un tiempo siendo un lastre para el equipo, después de haberlo levantado de las cenizas cuatro años antes y se fue por la puerta de atrás al AC Milan.
Predominio brasileño
El brasileño a su vez había tomado el relevo de Juan Román Riquelme, si bien su reinado como figura del club se limitó solamente a la desastrosa temporada 2002-2003, que comenzó con Louis Van Gaal en el banquillo y terminó con un milagroso sexto puesto (bajo el mando de Radomir Antic) que solamente sirvió para que la entidad presuma de no haber faltado nunca a citas europeas.
En 2002 se había marchado, también por la puerta de atrás, Rivaldo, señalado como gran culpable de que el club llevara ya 3 años sin títulos (todavía les quedaban 2 más). Coexistió en sus primeros años con Luis Figo, con quien compartía el estatus de gran figura hasta que en el año 2000 se consumara la “traición” más famosa de la historia del deporte rey y el luso se fuera al Real Madrid. El cuadro culé tardaría mucho en recuperarse del golpe.
Rivaldo había llegado en 1997 tras la marcha, también polémica, de Ronaldo Nazario al Inter de Milán, tras haber maravillado a todo el mundo con una temporada única, como pocos han hecho en Can Barça. Fue Rivaldo el elegido para ocupar su lugar pero pese a que ganó 2 Ligas y 1 Copa del Rey con Louis Van Gaal al principio (más títulos que Ronaldo), jamás dejó la misma sensación en la grada.
Ya metidos en el ocaso del Dream Team se puede hablar de las salidas de Romario (en enero de 1995 tras la derrota por 5-0 en el Santiago Bernabéu), la de Michael Laudrup (se fue al Real Madrid después de la final perdida de Copa de Europa en Atenas), la de Bernd Schuster (que también aterrizó en el eterno rival) o Diego Armando Maradona, que escogió al Nápoles.