Cristiano Ronaldo tal vez sigue celebrando el trofeo más grande de su carrera, el único que hasta ahora ha ganado con la Selección de Portugal. Nada más y nada menos que de la Eurocopa. ‘CR7’, acostumbrado a solo obtener galardones con sus clubes, al fin pudo lograr algo que ni siquiera Figo o Eusebio ganaron en el pasado.
Los minutos más tensos para todos los lusos llegaron desde que Éder metió el único tanto del partido hasta que el juez tocó el pitazo final. El descontrol fue automático y el rostro del delantero del Real Madrid se llenó de lágrimas, fruto de la alegría de los lusos.
Portugal es campeón de Europa por primera vez en su historia y Cristiano Ronaldo fue uno de los protagonistas de tal hazaña. Independientemente de haber tenido un campeonato flojo, los resultados sí se les dieron. El reloj marcaba la hora de la premiación y por un tema de agradecimiento, la terna arbitral fue la primera en ser condecorada.
Nada de esto tenía nada de inusual hasta que ocurrió lo impensado. Tras la caminata de los árbitros ingleses hacia el podio, Cristiano Ronaldo sujetó el rostro de Mark Clattenburg, juez principal del encuentro, descargando con él toda su alegría.
Clattenburg, de 41 años y nacionalidad inglesa, reaccionó de la mejor manera. Definitivamente no fue una agresión, sino un arranque del momento comprensible; total, no todos los días se gana una Eurocopa…
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