El delantero y capitán de la selección de Argentina, Lionel Messi, destacó este domingo el gran nivel de juego que está demostrando la albiceleste en la Copa América, al tiempo que apuntó que no merecen sufrir como hasta ahora para superar rondas, con lo que explicó que seguirán tratando de "imponer su estilo" de cara a las semifinales del martes ante Paraguay. "No merecemos sufrir tanto. En todos los partidos fuimos superiores a los rivales, especialmente contra Colombia. A veces uno no sabe qué pensar. Por suerte pasamos. Generamos muchas situaciones y merecemos vivir los partidos con un poco más de calma", afirma en una entrevista al diario 'La Nación'.
Sobre su falta de acierto de cara a portería, Messi reconoce que "ya no sabe qué decir ni qué pensar". "Ante Colombia tuve dos situaciones increíbles. Hablando del cabezazo con Ospina, no sé qué pasó, ya estaba en el piso y le puse un frentazo fuerte. No entiendo cómo la sacó. Cuando vi que la desvió con un manotazo me quería matar. Realmente lo felicito, fue una atajada increíble".
Sin embargo, a pesar de la falta de eficacia, el de Rosario destacó el nivel del equipo. "Estamos cerca del ideal. Tenemos que tratar de jugar todos los partidos de esta manera. El partido contra Colombia fue de lo mejor que hicimos en la Copa, hay muchas cosas para rescatar. Tenemos que estar orgullosos del nivel que venimos teniendo", reconoció el argentino.
"No es fácil encontrar a una selección que juegue como lo intenta la Argentina. Somos un equipo que impone un estilo y que intenta jugar mucho por abajo. Creamos muchas situaciones y creo que eso la gente lo valora. Se pasó a las semifinales de la manera en que queremos jugar. Nos faltó eficacia, pero estamos en carrera", concluyó.
Por otro lado, Messi explicó su abrazo con Tévez, el artífice del pase a semifinales con el penalti decisivo en la tanda ante Colombia. "Lo abracé con felicidad, estábamos todos locos con su definición. Son esos momentos de locura que se dan en estas situaciones. Carlitos se lo merecía, después de lo vivido en la última Copa América. La imagen es imborrable. Me llevo muy bien con él, al igual que con el resto de mis compañeros. Nunca hubo nada, ni hubo problemas con Carlos", afirmó.