La Selección Chilena estaba muy jugada en ataque por lo que era posible que llegue el segundo de Ecuador y vaya que así fue. Brayan Angulo sirvió para Moisés Caicedo, quien sacó un potente disparo que fue imposible de atajar para Claudio Bravo sentenciando la historia en el San Carlos de Apoquindo.
Moisés Caicedo, la gran sorpresa del grupo: el XI sudamericano más valioso de todos los tiempos