El Bayern Munich derrotó por 2-1 al Eintracht de Fráncfort este miércoles y se clasificó para la final de la Copa de Alemania, que disputará contra el Bayer Leverkusen el próximo 4 de julio en Berlín.
El croata Ivan Perisic adelantó a los bávaros en la primera parte (14), pero Danny da Costa empató para el Eintracht bien entrado el segundo tiempo (70),
Cuatro minutos después, le goleador polaco Robert Lewandowski marcó el definitivo 2-1 para clasificar a su equipo a una nueva final copera, en la que buscará su vigésimo titulo.
"No siempre tomamos las mejores decisiones en el área, que nos habría podido dar una ventaja de tres o cuatro goles al descanso y que nos podría haber hecho la vida más fácil", explicó tras el partido el delantero Thomas Müller.
"En la segunda parte se pudo notar el cansancio en ambos equipos, pero defendimos bien, especialmente los balones largos", añadió.
Los futbolistas del Eintracht Fráncfort jugaron con una camiseta con la inscripción "#blacklivesmatter" (las vidas negras cuentan), el lema que se ha popularizado en las protestas por la muerte de George Floyd, el afroamericano muerto durante su detención a manos de un policía blanco en Mineápolis hace dos semanas.
Como ya hiciera el pasado fin de semana en la Bundesliga, el Bayern calentó con una camiseta con el mensaje: "Tarjeta roja al racismo".
"Nuestro equipo y todo el Eintracht Fráncfort estamos unidos contra toda forma de racismo y queríamos demostrarlo públicamente hoy", explicó el director del club Fredi Bobic antes del partido disputado, a puerta cerrada, en el Allianz Arena de Múnich.
El martes, el Bayer Leverkusen había logrado el primer boleto para la final, al derrotar por 3-0 al modesto Sarrebruck, un equipo de la cuarta categoría del fútbol alemán.
Será la cuarta final copera (1993, 2002 y 2009) para el Leverkusen, que lleva 27 años sin ganar un gran título, precisamente el que supuso hasta ahora su única copa. AFP