El Leicester City es una de las grandes sensaciones de la presente campaña en la Premier League, habiéndose convertido en uno de los clubes más destacados en el panorama internacional del deporte rey. Todo hace indicar que el Liverpool conquistará su primera Liga desde hace casi 30 años (aún no la ha ganado en su formato actual), aunque el objetivo de los Foxes es avanzar a la Liga de Campeones.
Por ahora, Brendan Rodgers está cumpliendo con creces, dado que el campeón de la Premier 2015-2016 se encuentra en la segunda plaza del torneo de la regularidad en Inglaterra, justo por delante del Manchester City de Pep Guardiola. Habrá que ver si es capaz de mantener dicho rendimiento durante el segundo tramo del curso, cuya fórmula del éxito está siendo la apuesta por el talento joven (misma filosofía de Frank Lampard en el Chelsea).
Dejando a un lado la figura de Jamie Vardy, que es el auténtico killer del Leicester, jugadores de la talla de James Maddison o Ben Chilwell son pilares fundamentales para Rodgers. Es por ello que, en unas declaraciones de las que se ha hecho eco Sky Sports, el míster del club del King Power Stadium ha asegurado que no pretende desprenderse de ninguno de sus baluartes: «Nadie se irá de aquí si no queremos que los jugadores se vayan. Creo que hemos tenido varias consultas en términos de préstamos para algunos de nuestros jugadores jóvenes, pero no queremos que se marche ninguno».
A lo que ha añadido que «sabemos que si deseamos jugar una competición europea la próxima temporada, necesitaremos profundidad, pero enero es un mes muy difícil. Creo que veremos si podemos mejorar el grupo. Si no, tendremos que esperar hasta verano. Como dije antes, estamos en una situación muy buena y no queremos hacer nada. Es necesario que los jugadores que puedan llegar, mejoren la calidad del grupo». Igualmente, el citado medio asegura que el interés del Manchester City por Çağlar Söyüncü se habría disminuido de cara al periodo invernal.