Una hora antes de que se anuncien los resultados oficiales de las elecciones para el directorio de Barcelona 2019-2023, Carlos Alfaro Moreno y los miembros de su lista ya celebraban como ganadores, pero cuando se le preguntó al exjugador canario ¿ya le podemos llamar presidente?, respondió: “No aún”.
Pero lo hizo no solo porque en ese momento el Tribunal Electoral todavía no difundía los datos finales, sino porque Alfaro Moreno prefiere que lo sigan llamando Beto, apodo con el que llegó por primera vez a Barcelona en 1994 como refuerzo argentino, o Alfarito, apelativo con el que se retiró del fútbol en el mismo club torero en 2002, cuando ya se había convertido en un ídolo de la afición amarilla.
Por eso, explicó, el sábado “cuando nos reunimos en un desayuno que organizamos con 500 socios (antes de la elección), les dije que está prohibido llamarme presidente. Yo soy Beto, soy Alfarito; y si me dicen de otra manera, siento que estoy perdiendo el cariño que me han dado siempre, y lucharemos mucho, dentro de estos cuatro años, para que la gente mantenga ese cariño”.
El exatacante argentino, nacionalizado ecuatoriano en el 2003, confesó que nunca soñó ser presidente torero, pero hoy “esta es una realidad y hay que vivirla con los pies sobre la tierra, solucionando los problemas que tiene el club. Estamos mejor que cuatro años atrás, pero nos falta todavía seguir construyendo el equipo que queremos que sea el mejor del continente, ese es el objetivo”.
El verdadero sueño de Alfaro es volver a poner al club en una final de Copa Libertadores (Barcelona ha sido dos veces finalista) y esta vez sí ganarla.
“Agradezco a Dios por esta gran bendición. Estamos convencidos de que si nos ha traído acá es para cumplir una gran misión”, expresó. Pero para cumplir esa misión lo más pronto requiere del apoyo del actual presidente, José Cevallos, su oponente en estas elecciones y a quien acompañó como vicepresidente deportivo en los tres primeros años de administración de Pepe Pancho.
Esta campaña es la esencia de que queremos un Barcelona diferente, sin enemigos; que en las asambleas seamos un grupo buscando lo mejor para el club.
Carlos Alfaro Moreno, presidente electo de Barcelona
Y espera contar con eso, porque tiene “la tranquilidad de haber hecho una campaña limpia. No hizo falta hacer daño a la gente que administra actualmente para ganar la elección, ni hacer fuerza para que al equipo le vaya mal, como años atrás, porque yo como jugador percibí eso”. Alfaro Moreno le ganó a Cevallos en estas elecciones con 1569 contra 1086 votos. Pero hoy Beto desea que eso quede atrás.
“Queremos pedirle permiso a la actual administración para entrar a empezar a trabajar, ganarle tiempo al tiempo. Me encantaría conocer al profesor, Leonardo Ramos, ver su trabajo, conocerlo de cerca. Él fue nuestra primera opción (cuando se inició el directorio con Cevallos)”, dijo.
Sobre su decisión de mantener o cambiar de técnico una vez que asuma la dirigencia, Alfaro Moreno aclaró: “No vamos a desestabilizar. La prioridad debemos dársela al profe Leo Ramos, porque está haciendo un gran trabajo y luego analizar si queremos comenzar de cero, pero ahora lo real es que tenemos que conocer la realidad del profesor”.
No hay mucho tiempo para celebrar, hay mucho sí por construir y para trabajar, así lo tomamos desde ahora.
Carlos Alfaro Moreno, presidente electo de Barcelona
Por eso, el presidente electo de Barcelona insistirá en solicitarle a Cevallos el permiso para comenzar a relacionarse con el club y el plantel, tal como ellos lo hicieron a finales del 2015.
“Ese es el permiso que queremos solicitar. La gestión de José Francisco termina en la semana después de la finalización del campeonato. Debe ser como hace cuatro años, que entramos un 15 de octubre, eso nos permitió conocer a (Guillermo) Almada (ex-DT), al plantel, sobre todo lo administrativo. Nos urge empezar cuanto antes”, reiteró.
Sobre la plantilla de jugadores que tiene actualmente el equipo y con la que peleará los playoffs de la LigaPro (instancia a la que ya tiene asegurada la clasificación), dijo: “Ese un orgullo de plantel que tiene Barcelona. Los conozco a todos prácticamente, es más los formamos nosotros, en el 2016, 2017, y ellos saben cuánto afecto, respeto y cariño hay hacia ellos y sus familias”.
Otro aspecto que espera atender, una vez que se haga cargo de Barcelona, es el déficit en las cuentas. “En Barcelona uno duerme y se despierta pensando en la deuda, que ha sido un punto flaco de esta administración, queremos solucionar ese problema, hay que fortalecernos en ese aspecto”. Porque “en lo deportivo nos conocen ya. Me ha tocado ser parte de todas las áreas que uno pueda soñar dentro del club, y en cada una me tocó pensar con grandeza en esa exigencia que pide el club y eso haré ahora”. (D)
1531 socios no votaron
Del padrón de 4215 socios de Barcelona habilitados para participar en los comicios, 2684 se acercaron a las urnas.
De ellos 1569 votaron por el ganador, Carlos Alfaro Moreno.
483 los votos de diferencia
La lista de Carlos Alfaro Moreno recibió 1569 votos y la de José Francisco Cevallos 1086. El exdelantero ganó la presidencia por 483 de diferencia (el 59% de los socios que asistieron).