El combinado más débil, a priori, del Grupo B, aunque no por eso hay que subestimarla en sobre manera. Irán se clasificó como la selección asiática que más puntos obtuvo en la fase clasificatoria, lo que la avaló en su marco como una de las más potentes del continente. A pesar de la inferioridad que tendrían respecto a todos sus rivales, Carlos Queiroz intentará introducir a los suyos en la siguiente fase por muy pequeñas que sean sus opciones. A continuación, vamos a repasar los tres nombres más importantes con los que cuenta en sus filas:
Sardar Azmoun (23 años, Rubin Kazan)
Máximo anotador en la fase de grupos que le dio el billete a su país (11 goles), preocupa su actual situación en el Rubin Kazan, donde intercala titularidades con suplencias. Su gol es uno de los factores más importantes con los que cuenta la Selección de Irán. Cuando eche de nuevo a rodar la competición en el este de Europa, las miradas estarán puestas en el rendimiento del delantero.
A pesar de que comparte el puesto con otros jugadores de mayor experiencia, la composición del ataque, repartido entre dos o tres miembros, le hace tener mayores oportunidades de no caerse de su sitio. Además, la confianza de Queiroz en él no se resentiría, esperando contar con él para la punta de su ofensiva.
Alireza Jahanbakhsh (24 años, AZ Alkmaar)
Uno de los jugadores llamados a tener mayor peso dentro del combinado nacional asiático. Jahanbakhsh es uno de los miembros del ataque del AZ Alkmaar en la Eredivisie donde está realizando una temporada realmente buena con 9 goles y 12 asistencias en 24 apariciones con el club holandés.
Su verticalidad, aprovechando su velocidad punta para coger la banda y desbordar al contrario, le hace llegar fácilmente hasta las zonas cercanas del área, habilitándole como un gran asistente. Además, su capacidad para llegar desde atrás y aprovechar los espacios ha sido un arma del que ha hecho gala en sus encuentros. Un jugador a tener en cuenta para cualquier rival.
Saman Ghoddos (24 años, Östersunds)
El atacante iraní que actualmente milita en la Allsvenskan, primera división sueca, podría ser la sorpresa en la convocatoria de Carlos Queiroz. Su pasada temporada en el Östersunds, respaldado con la aportación en el equipo en la UEFA Europa League, le han hecho valedor de la llamada del técnico luso.
Un delantero que ha destacado por su movilidad y definición, donde el Celta de Vigo estuvo muy interesado en convertirle en el relevo de John Guidetti durante el pasado mercado aunque finalmente no se concretó. El Mundial de Rusia puede ser un escaparate ideal para ver sus condiciones.