El Porto, dirigido por Sérgio Conceição, fue humillado por el Liverpool de Jürgen Klopp en su propia casa. Sadio Mané empezó su fiesta al 25' y terminó en hat trick, se sumó Mohamed Salah y Roberto Firmino cerró la cuenta en un 5-0, sin que los Dragones opusieran resistencia.
Tras el duelo de ida, del que Héctor Herrera y Diego Reyes fueron parte como titulares y "Tecatito Corona" como suplente, el Porto protagonizó la peor derrota de su historial en competencias europeas siendo local.
El partido de vuelta supone un trámite para el club inglés en Anfield y los antecedentes los respaldan porque las hazañas en la historia de la competencia no implicaron ventajas tan amplias.
En la edición anterior, el Barcelona silenció a los pesimistas que anticiparon la victoria del París Saint-Germain en la serie de octavos de final de la Champions League. Los blaugranas rompieron las quinielas, dejaron atrás el marcador de 4-0 en la ida y cerraron con 6-1 en el Camp Nou. El partido quedó inscrito en el libro de hazañas porque ningún otro equipo se había levantado de tal goleada.
La posibilidad existe; sin embargo, los Dragones se enfrentan al Liverpool, el club que protagonizó la mayor voltereta en una final de Champions League. Aquella noche es conocida como el "MIlagro de Estambul". Ocurrió en la edición 2004-05, los Reds igualaron un 3-0 del Milan para forzar a la prórroga y definir el título desde los once pasos. La victoria valió su último título de Champions.
Herrera, Reyes y Corona son la última posibilidad de representación mexicana en competencias europeas y necesitan seis anotaciones. El resto de los seleccionados han sido eliminados tanto de Champions como de Europa League.