Lionel Messi, al igual que muchos futbolistas a lo largo de la historia, no era uno de los mejores en la escuela. El jugador zurdo pensaba más en la pelota que en las materias del salón.
Una versión miniatura del actual crack esperaba el recreo para salir a jugar a la pelota. Todos los días, la misma escena se repetía. Hasta que su maestra, Silvia, una mañana tomó su boletín y recreó el diálogo.
-Lionel, estuve mirando tus notas y no aprobás casi ninguna materia. Tenés que estudiar. ¿Qué está pasando?
-Es que a mí lo único que me gusta es jugar a la pelota, seño.
-¡Nene, dejá de patear y ponete a estudiar que así no vas a llegar a nada! ¿Vos te pensás que el fútbol te va a dar de comer?".
La maestra Silvia confesó el relato que sostuvo con Lionel Messi 20 años después. Media avergonzada y entre risas confesó que su felizmente su "alumno la desobedeció".
"Por suerte mi alumno me desobedeció. Lo hice con instinto maternal y de docente, fue un simple consejo. Ahora esto me da un poco de vergüenza... ¿Quién iba a imaginar que se convertiría en el futbolista más importante del mundo?", sostuvo para "La Nación".
Lionel Messi es frecuentemente recordado por sus compañeros de clase y por su maestra como un tierno y tímido niño que siempre pensaba más en el balón que en las materias.
"Leo jamás se olvidó de sus amigos, de sus orígenes, de su ciudad. Eso es digno de destacar. A pesar del éxito y la popularidad sigue siendo el mismo chico humilde que conocimos en estas aulas", comenta Silvia.
El niño alumno hoy convertido en un hombre futbolista, está a horas de casarse con Antonella Roccuzzo. La novia de siempre se volverá la Sra. de Messi y quizá regresen, junto a su esposa, a la Escuela N°66 General Las Heras. En donde Silvia, la maestra que un día lo desafió, lo está esperando.