El arquero del Borussia Dortmund, Roman Buerki, afirmó que padece todavía insomnio, tras el ataque perpetrado esta semana contra el autobús de su equipo, y reveló que no pudo concentrarse durante el partido de la Liga de Campeones que debió disputar un día después del atentado.
Buerki, integrante de la selección suiza, estaba sentado junto al zaguero español Marc Bartra, quien sufrió heridas que requirieron una intervención quirúrgica luego que tres artefactos estallaron al paso del autobús, el cual emprendía su camino desde el hotel hasta el estadio donde se realizaría el martes el encuentro de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones ante el Mónaco.
El partido se llevó a cabo al día siguiente.
"Tengo todavía problemas para dormir", confesó Buerki al diario suizo Der Bund. "Eso es lo peor, que no puedo dormir por las noches. Cuando despierto, me alegra estar en cama y en casa".
El guardameta añadió que, durante el cotejo del miércoles, que el Dortmund perdió por 3-2, notó que se percataba "más tarde de todo lo que ocurría en la cancha, como si tuviera un velo frente a los ojos".