La temporada del Everton ha pasado de ser decepcionante en el terreno de juego (marchaba en el puesto 14 con 24 puntos) a convertirse en un auténtico calvario, ya que el club de Liverpool ha sido golpeado con una sanción significativa por parte de la Premier League. La pérdida de diez puntos, resultado de infracciones financieras y de sostenibilidad, ha dejado al cuadro azul en una posición precaria tanto en la tabla de posiciones (ver clasificación) como en el panorama general del fútbol inglés. Según medios ingleses, se trata de la sanción más dura que afronta un equipo inglés en toda la historia de la competición local.
La Premier League acusó al Everton de irregularidades económicas durante la temporada 2021-2022, lo que llevó a la apertura de una investigación exhaustiva por parte de una comisión independiente. Este proceso se prolongó desde marzo hasta el mes pasado, cuando se llevó a cabo un juicio que culminó con una sanción drástica para el club.