La justicia francesa investiga un presunto caso de tráfico de influencias, que afecta a un ex vicepresidente de la Asamblea Nacional gala, que pudo maniobrar para que el PSG obtuviera ventajas fiscales en el pago de la cláusula de 222 millones de euros al Barcelona para fichar a Neymar en 2017.
Según varios medios, los investigadores poseen ingentes intercambios telefónicos entre el que fuera vicepresidente de la Asamblea Nacional, Hugues Renson, del partido del presidente, Emmanuel Macron, y un alto directivo del PSG, su entonces director de comunicación Jean-Martial Ribes.
De esas conversaciones podría derivarse que Renson maniobró para que el club obtuviera ventajas fiscales en el pago del que es todavía el mayor traspaso de la historia del futbol.
A cambio, el ex diputado obtuvo entradas para el Parque de los Príncipes y otras ventajas.
Renson interrogaba a varios ministros y, posteriormente, rendía cuentas a Ribes con quien se reunió en diversas ocasiones, algunas de ellas en presencia del presidente del PSG, Nasser Al Khelaifi.
FCM