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Lionel Messi está acostumbrado a jugar bajo la presión que implica estar en el Olimpo del fútbol desde que ganó su primer Balón de Oro, en 2009. Este lunes recibiría el séptimo para seguir siendo el más galardonado de la historia. Pero esa demanda externa se le hizo más pesada esta temporada, entre un calendario que estrangula el físico y la mente de un futbolista de élite, y el repentino cambio de club, de país...de vida cotidiana. En medio de ese contexto, el ‘10′ empieza a mostrarse en toda su dimensión en el PSG: este domingo dio tres asistencias en la victoria 3-1 ante el Saint-Étienne del peruano Miguel Trauco.
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La figura fue Marquinhos por sus dos goles, el destacado fue Ángel Di María con su tanto, las luces se fueron con Sergio Ramos y su debut, y las toda la atención -y preocupación- se la llevó la dura lesión de Neymar. Pero Leo volvió a ser determinante para el cuadro parisino en la Ligue 1, un torneo que le ha costado más de la cuenta.
El arranque de su idilio con el París Saint Germain no ha sido el mejor. Su llegada a Francia con el torneo iniciado, los constantes viajes para defender a su selección y las secuelas que le dejó el planchazo del venezolano Luis Martínez en la pierna izquierda en un duelo por Eliminatorias. Factores que mermaron en el físico del rosarino de 34 años que marcó su primer gol en el torneo doméstico la fecha pasada ante el Nantes, en su sexto partido liguero. Una estadística muy superada en la Champions League, con tres tantos en tres cotejos.
El fútbol, industria que a veces parece estar diseñada más para máquinas que para seres humanos, es un negocio impaciente. Y de eso ha probado Leo en París. Leonardo, director deportivo del PSG, no dudó en quejarse ante la prensa porque el tiempo que el argentino le dedica a la ‘Albiceleste’ se lo quita a conseguir una más rápida adaptación a su club. Las dudas por el rendimiento del equipo caen siempre sobre el mejor.
Este lunes 29 de noviembre, en el Théâtre du Châtel de París, se entregará el Balón de Oro 2021. Todos los medios locales, y también internacionales, han informado en estos últimos días que Messi será el ganador. Una noticia que para muchos es polémica por el presente del astro, pero es totalmente justificada si se tiene en cuenta todo lo que hizo en el año. Repasemos.